Nuevos municipios en EdoMéx podrían generar violencia e ingobernabilidad: Fernández

Naucalpan, Méx.- El diputado panista Pablo Fernández de Cevallos, señaló que antes de plantear la conformación de nuevas demarcaciones es indispensable resolver los conflictos territoriales ya existentes, pues se trata de un asunto “sumamente complicado” que, de no manejarse con respeto y prudencia, podría derivar en escenarios de violencia y afectar la gobernabilidad de la entidad.

La discusión -dijo- no puede limitarse a la voluntad política de algunos actores, sino que debe considerar aspectos técnicos y de infraestructura.

 “El tema de impuestos, agua e infraestructura hidráulica es fundamental, ya que hoy no existen condiciones para la creación de nuevos municipios, aunque haya intenciones de ciertos personajes”.

En un desayuno con medios de comunicación del Valle de México, el Legislador destacó que antes de promover cualquier municipio nuevo deben resolverse los problemas entre Teoloyucan, Cuautitlán, Tepotzotlán, Atizapán, Jilotzingo, entre otros.

“La Comisión de Límites Territoriales tiene que resolver primero los conflictos que existen, y después hablar de la erección de nuevos municipios, porque estos han derivado en enfrentamientos con armas, actos vandálicos, violencia y golpes; por eso hay que ser cuidadosos”, advirtió.

El Congreso del Estado de México inició el estudio de las solicitudes para conformar cuatro nuevos municipios: San Pablo de las Salinas, actualmente perteneciente a Tultitlán; San Francisco Tlalcilalcalpan, que forma parte de Almoloya de Juárez; San Miguel, localidad de Zinacantepec, y una cuarta comunidad cuyo expediente aún se encuentra en revisión.

De aprobarse, dijo Fernández de Ceballos, el Estado de México pasaría de 125 a 129 municipios, un cambio histórico en la organización territorial de la entidad.

La Comisión de Límites Territoriales y Municipios de la LXII Legislatura mexiquense ya aprobó la radicación de los expedientes, lo que significa que las solicitudes entraron en un proceso formal de análisis. El objetivo es otorgar autonomía política y administrativa a comunidades que aseguran haber sido abandonadas por los gobiernos municipales a los que pertenecen.

La creación de un nuevo municipio no es un trámite sencillo. La ley exige: Una población mínima de 40 mil habitantes; infraestructura propia para garantizar servicios básicos y administración local y algo muy importante, capacidad financiera para sostener un gobierno municipal.

“El Congreso fijó un plazo de 15 días hábiles para revisar los expedientes, con una resolución prevista a más tardar el 9 de enero de 2026”, mencionó Fernández de Ceballos.

Los impulsores de la propuesta aseguran que estas comunidades han sido relegadas y que la autonomía permitiría una mejor administración de recursos, mayor atención a servicios públicos y un sentido de identidad propio.

Sin embargo, el diputado Fernández de Cevallos advierte que la fragmentación territorial podría generar conflictos sociales, disputas por recursos hídricos y fiscales, además de complicar la coordinación en materia de seguridad.

“No podemos abrir la puerta a golpes o enfrentamientos que pongan en riesgo la paz social”, enfatizó.

Un parteaguas en la política local que, de aprobarse, el Estado de México se convertiría en la entidad con mayor número de municipios del país, lo que marcaría un precedente en la política nacional.

El reto será garantizar que estas nuevas demarcaciones cuenten con la infraestructura, recursos y gobernabilidad necesarios para no repetir los problemas que hoy enfrentan los municipios ya existentes.

“La Legislatura mexiquense enfrenta una decisión crucial que podría redefinir el mapa político del Estado de México”, finalizó.