Tras pandemia y sin ingresos, se movilizan familias a asentamientos populares

Zinacantepec, Méx.- Derivado de la pandemia, se ha notado que más familias se han movilizado por la falta de ingresos y se han dirigido a más asentamientos populares, indicó Ana Lilia Peñaloza, directora local de la organización TECHO.
Debido a que este fin de semana se realizó la construcción de viviendas de emergencia en la localidad de Barrio de México en Zinacantepec con el propósito es que esas familias en un futuro tengan un hogar digno para vivir. Señaló que han trabajado en asentamientos populares de la zona del Valle de Toluca.
De manera particular, en el Barrio de México trabajan desde 2019 en este proyecto de viviendas de emergencia que consiste en detectar y dar seguimiento a las problemáticas de las familias que habitan en la zona, el objetivo es que más adelante las familias generen condiciones para obtener una vivienda en condiciones idóneas.
Estas viviendas miden 6 por 3 metros cuadrados, son prefabricadas, se construyen con la ayuda de voluntarios y de las mismas familias en jornadas de tres días, depende del mantenimiento y cuidado pueden durar hasta 40 años.
No obstante, estas viviendas, son transitorias pues el propósito es que en un futuro familias que habitan en ellas, adquieran capacidades para construir o adquirir una vivienda propia y dejen la pobreza.
Relató que a la fecha llevan una intervención de más de mil viviendas en el Estado de México, para detectar a las familias se aplica todo un trabajo previo con vecinas y vecinos de estos asentamientos, realizan una caracterización familiar de los hogares con la que se permita conocer las condiciones en las que viven específicamente en temas de salud, habitabilidad, vivienda, servicios básicos y otros dos aspectos más que delimitan cómo viven.
A partir de esto, se aplica trabajo en conjunto con las mismas vecinas y vecinos, se forman mesas de trabajo en las que se prioriza a las familias con las que trabajarán de acuerdo a un puntaje y el tema comunitario. Con esta acción, señaló que con esta actividad se fortalecen cuatro capacidades comunitarias que son: organización, participación, vinculación con redes y autogestión.
Precisó que en la organización se aplican dos procesos de intervención, hay espacios de diálogo y mesas de trabajo donde la misma comunidad da seguimiento a las viviendas, en promedio las familias a las que apoyan con estas viviendas habitan las mismas por un periodo de 7 años.
“Una vez que se termina un proyecto, se evalúa, los vecinos deciden y volvemos a hacer este ciclo de nuestro modelo de trabajo”, Por lo que consideró que deberán trabajar intensamente en esta materia durante los siguientes meses.