¿Quién dice que bajó la pobreza en México?
Por: Laura Castillo García
Vocera del Movimiento Antorchista en el Estado de México
A pocos meses de que inicie el proceso electoral 2024 en que cambiaremos presidente de la República, la Cámara de Diputados federal (500 diputados), de Senadores (128), nueve gubernaturas y los congresos locales de 31 entidades federativas, la institución que mide el crecimiento del desarrollo social en el país –el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval)– ya inició con la publicación de resultados favorables al gobierno de López Obrador con el fin de poner su granito de arena para que la 4T retenga el poder político nacional y el mayor número de puestos que se jugarán en 2024.
Sí, en 2024 el partido Morena se juega la presidencia de México, además de que está interesado en ganar el mayor número de puestos políticos arriba mencionados dicen que con el objetivo de que “siga la transformación” que, según ellos, inició López Obrador en el 2018.
Hace algunos meses, el pasado mes de marzo, el presidente López Obrador dijo que los programas sociales por él impulsados habían “generado resultados positivos”, pero lo que no dijo es que los buenos resultados sólo son para López Obrador, el partido Morena y en general para la 4T, pues varios de los políticos de esa filiación han ganado un puesto de elección popular gracias que López Obrador reparte dinero público entre más de 25 millones de mexicanos, muchos de los cuales no son los más vulnerables.
Si no fuera por los más de 25 millones de mexicanos que reciben apoyos directos del gobierno federal, que también impactan a sus hijos y nietos que brindan otros millones de votos a la 4T, los malos resultados del gobierno de López Obrador bastarían para que los mexicanos inteligentes y honestos botaran al cesto de la basura al caudillo, a Morena y a toda su 4T.
Parece que los “resultados positivos” que los programas sociales le han dado a López Obrador no le son suficientes para ganar las elecciones de 2024. Si no es así, entonces ¿por qué tuvo que instrumentar otra estrategia para reforzar los resultados que le han dado los apoyos directos? Y es que el Mandatario sabe que los resultados desastrosos que ha tenido durante cinco años de gobierno, en todas las demás de la vida económica y social de México pueden hacerle perder no sólo el poder presidencial sino también las gubernaturas y todos los demás cargos públicos por los que contenderá en el proceso electoral de 2024.
Por eso, López Obrador –y tal vez gente de su círculo cercano, aunque dicen que el caudillo no escucha a nadie, sólo acepta – ideó una estrategia para reforzar los resultados que ha obtenido con los programas sociales: echó a andar a la institución que mide el crecimiento del desarrollo social en México; es decir, el desarrollo que el país ha tenido en salud, educación, seguridad ciudadana y empleo, que a su vez miden la disminución de los niveles de pobreza, desigualdad, exclusión, aislamiento y vulnerabilidad de los grupos más necesitados.
En un informe amañado en el que dice que 8.9 millones de mexicanos dejaron de ser pobres, basado en que ese número de mexicanos recibe apoyo directo del gobierno federal, el Coneval trata de oculta las dificultades a las que se enfrentan los mexicanos para pagar los servicios básicos de sus hogares; de salud de su familia, a la que ahora atiende en los consultorios de farmacias que han proliferado a lo largo del país; tampoco dice con suficiente claridad que a la gente no le alcanza el salario para concluir el mes con todos sus gastos pagados; no dice que muchas familias viven endeudadas con el tendero de la esquina porque su salario y el apoyo federal no son suficientes para adquirir los productos que necesita en su hogar. Y qué decir del truene de dedos que actualmente viven millones de familias para proveer a sus hijos de uniformes, zapatos y útiles escolares.
A pesar de los “apoyos directos” que López Obrador reparte con dinero producto de los impuestos, millones de mexicanos siguen padeciendo pobreza y miseria.
Pero, ¿por qué el Coneval dice ahora que se redujo la pobreza en México? Porque es una institución ideada por quienes detentan el poder económico del país y operada por los políticos afines a ellos. Las instituciones no se crean para para beneficiar a la mayoría de los mexicanos conforme a lo que dicen su “visión, misión y valores”, sino que se crean para proteger los intereses económicos y políticos de los ricos dueños del país. Los políticos no mandan en el país, ellos solamente protegen y defienden los intereses de los capitalistas multimillonarios, quienes crean leyes e instituciones que estén a su servicio.
En los últimos días hemos oído hablar, con motivo de los libros de texto gratuitos que López Obrador está imponiendo para el ciclo escolar 2023-2024, que México está en riesgo de llegar al comunismo. Nada más falso que eso porque el mesías no tiene nada de comunista, más bien su discurso y los apoyos directos van encaminados a lograr que la gente se confunda y crea que él es progresista y que está al lado de los trabajadores, pero en realidad lo que está haciendo es consolidar su posición en el gobierno a fin de seguir haciendo, desde la presidencia del país, lo que conviene a los multimillonarios dueños del país.
El que ahora el Coneval diga que bajó la cifra de pobres es una estrategia para hacer creer a los mexicanos que las cosas van bien con la 4T y que, por tanto, en el 2024 hay que volver a votar por los candidatos de Morena, aunque la gente no sepa de dónde salió esa gente ni qué han hecho para beneficiar a los mexicanos.
Por haberse dejado engañar con un discurso aparentemente progresista y cercano a la gente, los votantes llevaron al poder a López Obrador y a gente nefasta que asegura seguir la línea política del presidente de “no robar, no mentir y no traicionar a pueblo”, frase que en la práctica se ha desfondado, como lo hemos visto en los casos de varios funcionarios corruptos, en los propios hijos del Mandatario y ha sucedido con los alcaldes de Chimalhuacán, Ixtapaluca y Chalco, por mencionar algunos, que actúan en contra de la gente.
Y no hablemos de las muchas crisis que no ha sabido enfrentar López Obrador, mismas que han hecho sufrir a millones de mexicanos: sistema de salud en crisis permanente, desabasto de medicamentos elementales y especializados para combatir diabetes, cáncer y Covid-19; sistema educativo en crisis, insuficientes empleos para todos los mexicanos en edad de trabajar que ha hecho que crezca la informalidad; crecimiento de la inseguridad, la cual ya está arrancando vidas de gente inocente, incluidos niños; aumento creciente de los precios tanto de todos los productos, incluida la gasolina a pesar de que prometió, hasta que se le cansó la lengua, que disminuiría porque ya no habría corrupción, pero eso no ha sucedido. No hay duda, con López Obrador y su 4T crece la pobreza en México.
Toda institución oficial, ya sea el Coneval, el Inegi, Instituto de Transparencia, o cualquier institución que se les venga a la mente, han sido creadas para proteger y defender los intereses de los dueños del país, los grandes capitalistas del país, como Carlos Slim y Ricardo Salinas Pliego, amigos del alma del presidente y quienes quieren que en el gobierno siga la 4T para ellos poder seguir haciendo jugosos negocios que engrandezcan sus inmensas fortunas.
Los desastrosos resultados de López Obrador y la 4T dicen que la solución no está en votar nuevamente por ese proyecto político. La solución se encuentra en la educación política y organización del pueblo trabajador, quien debe formar un partido político que realmente represente sus intereses para que, llegado al poder, trabaje en la construcción de un país que con obra pública dignifique las condiciones materiales de los lugares en que vive la gente, que ofrezca empleos suficientes para todos y que estén bien remunerados. Eso es lo que necesita México para salir de la pobreza y vivir mejor.