Cierran presa ilegal en Valle de Bravo

Valle de Bravo, Méx.- Derivado de una denuncia emprendida por el Observatorio Ciudadano de la Subcuenca Valle de Bravo (OCVBA), la Procuraduría de Protección al Ambiente (PROFEPA) clausuró una presa artificial que violaba la normativa ambiental y no cumplía con los estatutos correspondientes.
De acuerdo al oficio PFPA/17.1/2C.28/2021 de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), dicha presa abarca una superficie de aproximadamente ocho mil metros cuadrados, ubicada en la localidad de Acatitlán.
El oficio reveló que esta presa no tiene la autorización correspondiente en materia de impacto ambiental para obras dentro del Área Natural Protegida (ANP) donde se encuentra el rancho Los Manantiales.
El lago artificial perteneciente a los principales accionistas de la empresa Alsea fue construido ilegalmente en Valle de Bravo y, al desbordarse, los primeros días de este mes de septiembre de este año y ocasionó afectaciones al ecosistema.
Accionistas de la empresa y operadora de restaurantes Alsea, construyeron el lago artificial en su rancho en Valle de Bravo que es ilegal y fue responsable de afectaciones al ecosistema cuando se rompió a inicios de septiembre, de acuerdo con información de Reforma.
La superficie del bosque fue afectada por el desagüe del lago, causando por el derrumbe accidental del bordo de contención, un aproximado de siete mil 500 metros cuadrados provocando la erosión del suelo forestal, así como derrumbe de árboles y flora de la zona.
“Se impuso clausura, mediante la colocación de dos sellos de clausura en el bordo afectado y la imposición de una medida de urgente aplicación”, notificó la dependencia. Además, indicó que la Unidad Jurídica adscrita determinará el resolutivo que en derecho proceda.
Fue el pasado 9 de septiembre, cuando el Observatorio Ciudadano de la Subcuenca Valle de Bravo (OCVBA), respaldado por diversas organizaciones y personas que lo suscribieron a título individual, denunciaron que esta obra irregular había tenido como consecuencia un grave accidente ocurrido el 3 de septiembre, cuando la infraestructura de la presa privada sufrió un daño en el talud de contención, ocasionando que millones de litros de agua se desbordaran e inundando sembradíos, propiedades privadas y llevando grandes cantidades de azolve a la zona del río El Molino, el cual desemboca en la presa de Valle de Bravo.