
Educación y cultura, las llaves para abrir el futuro de México: Colmenares
- Redacción
- 2 septiembre, 2025
- Nacional e Internacional
- David Colmenare, Educación, México
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Ciudad de México.- La educación y el acceso a la cultura no son solo derechos individuales, también son motores que impulsan el desarrollo de un país. Así lo destacó David Colmenares Páramo, al subrayar que ambos rubros deben verse como una apuesta estratégica para enfrentar los retos sociales de América Latina.
Recordó que la región arrastra rezagos estructurales que aún limitan el acceso equitativo a la educación y a la cultura. En el caso de la educación superior, por ejemplo, la cobertura ha crecido de manera desigual, y en zonas rurales apenas se ha expandido entre 2015 y 2020.
Aun con esas dificultades, aseguró que los gobiernos han tratado de revertir la situación con mayor inversión, conscientes de que la formación académica y cultural abren horizontes y fortalecen la responsabilidad social de los ciudadanos.
“Los beneficios van más allá del aprendizaje individual se trata de una apuesta humanista que ayuda a resolver colectivamente los problemas de nuestras sociedades”.
En este contexto, Colmenares hizo un recordatorio especial: el 22 de septiembre se cumple un aniversario más de la fundación de la Universidad Nacional de México, institución que consideró un verdadero motor de desarrollo: “Como pocas universidades del continente, la UNAM ha formado no solo profesionales capaces, sino ciudadanos íntegros y comprometidos con su entorno”.
También señaló que las grandes metas educativas no pueden alcanzarse en solitario. Requieren de la participación activa de la sociedad y de todas las instituciones del Estado. En este sentido, destacó el papel de la Auditoría Superior de la Federación, que con su labor de fiscalización contribuye a mejorar los procesos y garantizar que la educación y la cultura lleguen a más personas.
“La educación superior debe protegerse y la fiscalización es una herramienta clave para lograrlo”.
Y es que, al final, enfatizó que tanto la educación como la cultura son más que un derecho: son una brújula hacia el futuro. Invertir en ellas significa abrir puertas a nuevas generaciones, darle voz a más ciudadanos y construir un país capaz de enfrentar sus desafíos con talento, creatividad y compromiso.