Arquidiócesis exige ser incluida en debate sobre despenalización del aborto

Información y Fotografía: Fernanda Medina González

Ciudad de México.- Al señalar que “no es un tema que no se puede votar a la ligera”, la Arquidiócesis Primada de México exigió que en la discusión para despenalizar el aborto en cualquier momento del embarazo en el Congreso de la Ciudad de México es necesario escuchar a científicos, juristas, instituciones que atienden a mujeres que abortaron o que siguieron con su embarazo; así como a la Iglesia.

Desde su revista semanal, en su editorial titulada “Aborto: que todas la voces sean escuchadas”, recordó que el jueves pasado el Congreso capitalino puso pausa al dictamen aprobado en comisiones unidas que busca permitir en la CDMX “la práctica del delito de aborto en cualquier momento del embarazo”, pues señaló que, según las promotoras de esta modificación legal, “se retiró porque no podía garantizarse una votación aprobatoria”.

Asimismo, señaló que “algunos” diputados han dicho que, antes de su aprobación, quieren escuchar las voces de la sociedad, “lo cual es de reconocerse, pues es un tema que no se puede votar a la ligera”.

Por ello, consideró que es necesario escuchar la opinión de las ciencias médicas sobre el inicio de la vida humana, “demostrado que inicia en la concepción”, así como las consecuencias del aborto en las mujeres.

De acuerdo con la Arquidiócesis, “la mujer que aborta tiene de tres a cuatro veces más posibilidades de morir en el siguiente año que la que da a luz, según se demostró en un estudio en Finlandia”.

Resaltó que también se deben escuchar a juristas sobre “la violación que estarían cometiendo a las leyes, nacionales e internacionales, que protegen la vida; a las madres que han abortado y ahora padecen las consecuencias psíquicas, emocionales y físicas”.

Según el clero, en este debate existe una tercera voz que hay que escuchar, que es a la Iglesia, “pues ocho de cada diez mexicanos profesan el cristianismo”.

En su editorial Desde la Fe, la Arquidiócesis Primada de México pidió analizar algunos factores en torno al tema, como la política de aborto en la CDMX que lleva 17 años “no ha cumplido con mejorar la vida de las mujeres de esta ciudad. Podríamos decir que sí ha habido mejoras, pero no gracias a esta polémica política pública que permite desechar vidas humanas”.

Al basarse en estadísticas del gobierno capitalino, destacó que la mayoría de las mujeres que han recurrido a uno o más abortos en las instituciones públicas de salud, tienen entre los 18 y 24 años, son solteras, con estudios de preparatoria y dedicadas al hogar o a ser empleadas, “pero un porcentaje menor es el que estudia la universidad”.

Ante este dato, la iglesia analizó que actualmente, el 53% de la matrícula universitaria está conformada por mujeres, “pero es un gran logro que no depende de la política de aborto, pues la mayoría de las mujeres que han abortado no tienen estudios universitarios; luego entonces, el aborto no es una política que impulse la educación superior”.

Asimismo, argumentó que la política de aborto tampoco elimina la violencia contra las mujeres, pues, según el INEGI, la CDMX está en el quinto lugar nacional de mujeres víctimas de violencia en el último año.

Aunado a esto, aseguró que la modificación penal que se pretende en la CDMX “no afectaría el número de mujeres en cárcel, pero sí el de hombres”, pues, de acuerdo con datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en la CDMX solo hay una mujer en prisión por el delito de aborto y a nivel nacional existen 10, contra 112 hombres encarcelados por el delito de aborto.

Finalmente, aseveró que estos datos ayudan a reconocer que esta reforma de ley propuesta es innecesaria y sumamente injusta para la mujer, y para los seres humanos en desarrollo que pagan las consecuencias de políticas erróneas con su propia vida.