MÉXICO, PAÍS INVITADO

Las celebraciones por la Hispanidad ya han comenzado y mientras la presidenta de México se empeña, sin sentido, en una petición de perdón; en Madrid, México ha sido el país invitado a dichos festejos. La diversidad, el mestizaje y la unión de culturas ha quedado retratada en el Desfile conmemorativo del pasado sábado por las calles del Centro de la capital. Disfrutar de la fiesta, la alegría, la música y las tradiciones siempre es enriquecedor. Las catrinas pasaron luciendo muy orgullosas por la Gran Vía. Ya queda menos para que México rinda homenaje a los muertos como una festividad digna de ser vivida porque la grandeza de sus altares no hay palabras que las describan.

Dice el lema de este año que en Madrid caben todos los acentos. Es cierto que la capital de España es una ciudad muy acogedora y en ella hay una multiculturalidad que se ve a diario por sus calles. Sin embargo, estos días se festeja la Hispanidad cuyo día siempre estará marcado en el calendario en el 12 de octubre, pero ya se sabe, también, que cuando hay que organizar una fiesta, eso a los españoles no se nos da nada mal y cuando en ésta se junta todo el folklore hispano la diversión está más que asegurada. Por eso, con ese espíritu que reina en el ambiente, la reciente nombrada presidenta de México no es quien para empañar la unión de dos pueblos que están hermanados desde hace mucho tiempo. Es cierto que la ignorancia es atrevida y no le vendría nada mal leer a las señora Sheinbaum un poco de historia. Quizás cambie de opinión y deje de lado una leyenda negra que está intentado propagar únicamente con fines políticos. Tiene un sexenio por delante para indagar en la historia de México y como presidenta del país no le vendría nada mal.

Dejando al margen la política y la polémica, ahora de lo que se trata es de disfrutar. México siempre será especial para mí. Allí conocí a grandes amigos y aunque nos separan más de nueve mil kilómetros de distancia, ésta no ha sido capaz, ni lo será, de romper los lazos que nos unen. El tiempo ha querido que este año me haya reencontrado con muchos de ellos y eso ha fortalecido nuestra amistad. La vida nos juntó y, por eso, siempre tenemos momentos para brindar. Podemos festejar la Hispanidad, pero la amistad siempre está por encima de los días señalados. Eso sí, el próximo sábado, aquí, es fiesta nacional.

Madrid se ha volcado un año más con la Hispanidad. Hay un programa con todo lo que ha organizado. Manuel Turizo llenó el pasado domingo la calle Alcalá. La organización del concierto ha dejado mucho que desear para un público que se quedó sin poder disfrutar de su artista favorito. Por delante quedan, entre otros, Diego Torres o Los Sabandeños. Si las lluvias no lo impiden habrá que poner el broche final con ellos el próximo fin de semana. Eso sí, nunca hay que olvidar que ante todo, como bien canta el argentino, hay que pintar todo de color esperanza. Solo así sabremos sonreír ante lo inesperado o ante la ignorancia de quien quiere que todo sea de otro color.