Ley y Realidad

Por: Iñigo Cantú 

La Reforma al Poder Judicial, lo que nos toca hacer

Ya en otra participación en este espacio hablé de los cambios propuestos por el ejecutivo para modificar al poder Judicial, pero en aquella ocasión no di mi opinión al respecto, de hecho, solo comuniqué la propuesta y las fechas en que se llevaría a cabo. Lo más que dije fue que me llamaba la atención que fuera el ejecutivo el que propusiera los cambios y no los propios miembros del poder judicial.

Sin embargo, esta vez, más que dar datos y reflexiones quisiera aprovechar para dar mi opinión respecto a lo que posiblemente sea uno de los cambios más trascendentales en la historia de nuestro país.

He sido litigante desde prácticamente el inicio de mi carrera, es decir desde finales de la década de los 90´s, tengo aproximadamente 25 años litigando y desde luego he visto sentencias dictadas conforme a derecho y he visto sentencias que no dictaría un estudiante de primer semestre de la carrera de Derecho de una universidad patito, he visto como los ministros de la corte con tal de darle la razón al poder ejecutivo hacen maromas que dan risa y pena ajena.

En mi opinión el Poder Judicial, en efecto, requiere un cambio, igual que lo requiere el ejecutivo y no se diga el legislativo, desafortunadamente la última década y algunos otros sexenios previos nos han mostrado que la política y el gobierno no piensan en el pueblo ni trabajan para el pueblo.

Hoy tenemos, salvo algunas honrosas excepciones, una de las peores cortes que ha tenido este país, ministros cuyo título está en duda, ministras sin experiencia judicial ni jurídica, ministros que se alinean o que “litigan” en favor de un interés particular sin atender a lo que dicta la Constitución, cuando su trabajo debe ser imparcial, además, tenemos magistrados, jueces y secretarios de estudio y cuenta puestos ahí por sus amigos o familiares y no precisamente por su calidad técnica.

Insisto, dentro de todo el Poder Judicial claro que hay excepciones, pero para que este país tenga un Estado de Derecho, la excepción debería ser al revés, los malos pocos los buenos muchos, no al revés.

Pues bien, el cambio es inminente, y no hay nada que lo vaya a evitar, que el voto para escoger a los jueces, magistrados y ministros no va a resolver el problema, no, pero se me ocurrió que lo que si podemos hacer; es tratar de fortalecer esta propuesta, es decir, postular a verdaderos juristas, esos que no les gusta la política pero que aman al país, intentemos ser mayoría, generemos grupos hagamos la chamba de convencer a la ciudadanía desde nuestra trinchera de cuál debe ser el perfil del juez, magistrado o ministro que si queremos.

Es decir, si bien la reforma será imparable, porque no, en lugar de quejarnos, nos arremangamos las camisas y nos ponemos a trabajar por el bien de este país, todos los que consideremos que podemos ser buenos jueces, magistrados o ministros propongamos serlo, y si lo logramos, hagamos una diferencia, veamos esto como una oportunidad real de tener el poder judicial que si queremos.

Basta de dejarle a los “otros” la chamba, basta de quejarnos de lo que hacen los demás… te estoy hablando a ti, si eres un abogado con experiencia, realmente enamorado de este país que tanto nos ha dado, te invito a que desde donde estas lo des todo y veras que la marea de buenos abogados arrasa con los mediocres, con los acomodaticios, con los que solo siguen órdenes. 

México es más que sus políticos, México es un país generoso, grande, pero, sobre todo, es un país con gente que si lo decide será una potencia mundial, aun a pesar de nuestros gobernantes. 

@leyyrealidad en ig.