La supuesta austeridad republicana de MORENA

Durante los gobiernos priistas anteriores para toda la burocracia era un punto de incertidumbre constante, la definición en cada uno de los “puentes” del año, si se iba a otorgar o no. Esto en términos generales podría quedarse simplemente en una condescendencia que se obsequiaba a los trabajadores del Estado, en favor de que disfruten con su familia los días festivos o incluso podría ser una travesura gremial, pero la verdad es que siempre trasciende un poquito más que eso.

Si bien, siempre se agradece que te obsequien algún día de vacaciones, el saber con cierto tiempo de anticipación si el “puente” se va a dar o no, implica una programación para tu propia familia, para planear actividades; sin embargo la trascendencia de un aviso oportuno significa que las oficinas que cuentan con plazos o actuaciones programadas, puedan planearlas en consecuencia y expedir el acuerdo de tales días para la certidumbre de sus plazos y actuaciones.

El primer diferenciador de este gobierno de Delfina es que, con mucho tiempo de anticipación, fue otorgado el plazo del primero al tres de noviembre de este año, por conmemoración del día dos de noviembre. Si bien es cierto que no hubo un oficio que formalizara tal indicación (lo que hubiera sido deseable), a través de los sindicatos se informó la indicación dada desde la gubernatura, lo que implica un cambio de estrategia, ya que muchas veces ante la confusión, los jefes detenían la información y hasta el mismo día que se otorgaba, se informaba del “favor” que él mismo les daba a todos sus subordinados, para que disfrutaran el día, lo que hacía que muchas actuaciones no pudieran reprogramarse y los plazos seguían corriendo, lo que implicaba el trabajo de muchos burócratas aún si el día fuese dado.

Sin duda es un punto a favor de nuestra gobernadora, pero lamentablemente existe un punto en contra.

Durante su primer mes de gobierno Delfina emitió un acuerdo de modificación a las Medidas de Austeridad y Contención del Gasto Público del Poder Ejecutivo del Estado de México, en el que adicionan una salvedad en la medida DÉCIMA TERCERA, ya que ahora lo previsto en esta fracción no será aplicable para el ejercicio fiscal en que inicie el periodo constitucional de la persona titular del Ejecutivo Estatal. (Gaceta de Gobierno, miércoles 18 de Octubre 2023), es decir, el listado de medidas de austeridad para todos los servicios personales (todo los recursos humanos), no aplican durante el primer año del gobierno de Delfina.

Es justificable que para iniciar un periodo de gobierno es necesario recurso y financiamiento de todo tipo, pero esto hace pensar que responde a la necesidad de organizar plazas y contratar sin medida (literal). La razón puede ser que si no hay dinero es porque se programó mal durante este año, o Del mazo se acabó lo que tenía o que a Delfina no le alcanza el recurso para todo lo que tiene planeado para este año. De cualquier forma, no deja bien parado a los gobiernos del PRI y de MORENA que se dieron la mano en símbolo de cordialidad y pasaron de manera pacífica la estafeta del mando.

Lamentablemente el acuerdo de modificación no es claro en su justificación, porque solo indica que es necesario para el desarrollo de las actividades del gobierno, al final esta adición implica la excepción para no aplicar la Ley, lo que repercute entonces en una ilegalidad, una trasgresión de la norma y sobre todo, un sinsentido al actuar gubernamental.

Mucho debemos exigir a este gobierno prometedor que inicia su sexenio, desde el fondo hasta la forma, sobre todo porque existen muchas expectativas sobre su buen desempeño ya que según lo dicho, se encuentra basado en principios y no el leyes, lo que debiera revestir las actuaciones de legitimidad.

Hablando de exigir formas correctas, espero que para lo subsecuente, a las personas que le escriben los discursos a nuestra gobernadora, no le exijan el conocimiento de palabras “rimbombantes”, ya que en uno de sus discursos de la semana pasada, pronunció hito (aquel referente histórico) como “jito”, lo que es disculpable para una candidata, pero reprochable para la gobernadora de uno de los Estados más productivos a nivel Latinoamérica, porque es referente y ejemplo de todos nosotros.

Esperemos se vayan puliendo tanto las formas como los fondos.