GRILLANDO

POR: JOSÉ ELÍAS NADER MATA  

Uno de los principios básicos de la democracia es que cualquier persona que cumpla con la Ley puede llegar a ser nuestro gobernante o servidor público, de ahí que en México históricamente hayamos tenido que aguantar las ocurrencias de algunos actores, cómicos o hasta deportistas, entre otros, que en su mayoría, han resultado ser una profunda decepción y un atraso para el pueblo mexicano.  

Un ejemplo lo tenemos a través del gobernador de Morelos, el exfutbolista CUAUHTÉMOC BLANCO, que se ha convertido en una tragedia para su entidad por su ignorancia, codicia y poca capacidad para gobernar. Sin embargo, quien esta semana se llevó las palmas de la vergüenza es la directora de la CONADE, ANA GABRIELA GUEVARA, que, si bien en el pasado fue orgullo deportivo de México, ahora es una vergüenza llena de cinismo, lo anterior, aunque el propio gobierno defienda sus errores.  

En una nación con autoridades gubernamentales y deportivas congruentes e inteligentes, a sus atletas ganadores y ganadoras se les recibe con honores por poner en alto el nombre del país, sin embargo, en México ha sido todo lo contrario con las nadadoras artísticas que lograron tres medallas de oro y una de bronce en la Copa del Mundo de Egipto, lo anterior a pesar del escaso  apoyo de la CONADE, donde la señora GUEVARA lejos de responder con sensibilidad e inteligencia las llamó deudoras y mentirosas, pues además reiteró que no le importa que sigan vendiendo trajes de baño para pagar sus competencias, inclusive por ella pueden vender calzones, Avon o Tupperware.  

De ese tamaño es las estupideces de aquellos que tienen el deporte nacional en sus manos, gente sin capacidad profesional y que lejos de ser un apoyo, se han convertido en los sepultureros del deporte, de ahí que ojalá el próximo sexenio cambie esto, pues definitivamente con GUEVARA no cambiará nada a pesar de que el deporte es una de las principales y más importantes herramientas para reconstruir el tejido social, algo que tanto le urge a nuestra nación.  

LA GRÁFICA DE HOY  

Es del segundo debate entre las candidatas ALEJANDRA DEL MORAL de la coalición del PRI, PAN, PRD y NA, “Vamos por el Estado de México” y DELFINA GÓMEZ de la candidatura común entre Morena, PVEM y el PT, “Juntos Hacemos Historia en el Estado de México”, quienes desde el Instituto Electoral de la entidad intercambiaron opiniones, propuestas, ideas y uno que otro ataque.  

Sin embargo, es que a lo largo de una hora nuevamente vimos un debate “light”, donde se leyó mucho y no pasó nada fuera de lo que hemos escuchado a lo largo de la campaña, lo anterior centrado en los temas que se designaron que fueron: Seguridad y Justicia, Economía y Empleo, Educación y Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable.  

El debate iba tranquilo, pero al llegar al tema del Medio Ambiente la cosa se puso sabrosa cuando ALEJANDRA habló de los millones de perros que había matado la administración de Texcoco que encabezó DELFINA, quien muy molesta le contestó rudo a la priista.  

En términos generales fue un debate de propuestas, sin los ataques a los que estamos acostumbrados en la política nacional y que indudablemente es una gran herramienta democrática, principalmente para que los indecisos, aquellos millones de mexiquenses que aún no saben por quién votar, pero que de forma responsable lo tendrán que hacer el próximo 4 de junio.  

GRILLANDO

Y VA DE CUENTO  

Una monja y un sacerdote de nombre ULISES URBINA cruzaban el desierto del Sahara montados en un camello. Al tercer día, una tormenta de arena les atrapó y se vieron obligados a buscar un refugio para guarecerse de ella. Cuando acabó la tormenta, ambos religiosos se percataron que el camello estaba muerto. Entonces el sacerdote le dice a la monja: Hermana, esto se ve muy mal, difícilmente sobreviviremos dos días aquí y el campamento más cercano se encuentra a una semana de camino. Así que ahora que sabemos que no sobreviviremos, quiero pedirle un favor. Nunca he visto los senos de una mujer. ¿Podría ver los suyos?  

La monja, un poco sorprendida, le responde: En las circunstancias en que nos encontramos, no veo ningún problema. Y mostró sus senos al cura.  

ULISES le dice nuevamente: Hermana, ¿le importa si los toco?  

La monja no puso ninguna objeción y se los dejó tocar. Después de unos minutos, con una picarona sonrisa, le dice al cura: Padre, ¿puedo pedirle yo ahora un favor? Nunca he visto el pene de un hombre. ¿Me dejaría ver el suyo?  

– Pues… En las circunstancias en que nos encontramos, no veo el posible daño, madre. Y entonces se lo mostró.  

– ¿Lo puedo tocar?, preguntó la monja.  

– Pues… ¡Tócalo!  

Después de varios minutos de tener la atención de la monja, el padre ya excitado no puede contenerse y acercándose a ella, le dice al oído: Hermana… ¿Sabía que si lo inserto en el lugar correcto, puedo crear vida?  

– ¿De verdad?  

– ¡Por supuesto!  

– Qué bien, Padre. ¡Métaselo al camello por el culo y vámonos de aquí!  

HASTA mañana con más GRILLANDO. Comentarios en Twitter en @pepenader y en [email protected]