GRILLANDO

POR: JOSÉ ELÍAS NADER MATA 

Junto con el 12 de diciembre, el 10 de mayo son de los días festivos más importantes en México, ya que, precisamente veneramos a nuestras madres, aquella figura llena de gracia, bondad, nobleza, amor y dedicación, que en nuestro país, son el núcleo de la familia y su pilar más importante. 

Ayer, no fue la excepción y en todo el país, los lugares estuvieron abarrotados, para consentir a nuestras “jefecitas”, pues nada como hacer el esfuerzo para llevarlas a un lugar y no festejarlas pidiéndoles que ellas mismas hagan de comer, como muchos abusivos y baquetones acostumbran. 

Sin embargo, ayer reflexionaba, una vez más, que, no sólo se trata de festejar a las madres mexicanas el 10 de mayo, sino de brindarles todo el apoyo los 365 días del año, para que su desarrollo personal, humano y familiar sea el idóneo, no como lamentablemente vemos en muchos casos donde el machismo, la misoginia, el acoso, la discriminación y la violencia son factores de todos los días y a los que se deben de enfrentar las mujeres mexicanas. 

Hace poco, hablaba de cómo operan oficinas de gobierno, que en el papel, deberían apoyar a las mujeres, la forma en la que algunos “funcionarios públicos” corruptos, lejos de dar el respaldo legal a las que, se han atrevido a denunciar, se han convertido en cómplices de los agresores y violentos a cambio de su “moche”, algo que en los hechos indica que el discurso sobre la equidad y la justicia de género está muy lejano a los hechos. 

Por ello, es que, no solo se trata de festejar el 10 de mayo, se trata de que como sociedad entendamos que debemos transitar por un cambio de fondo, donde las mujeres, además de ser madres, tengan todas las oportunidades de desarrollarse en el ámbito que gusten y no estar esclavizadas todo el tiempo a los hijos simple y sencillamente porque a los machos y estúpidos no se les ocurre asumir su responsabilidad paternal. 

Insisto, no solo el 10 de mayo con flores y unos cuantos regalos, demostremos el cariño a nuestras madres con hechos a lo largo del año, construyendo una sociedad más justa para que realmente podamos garantizar la equidad de género y desterremos el machismo y la violencia que tanto daño le hace a las madres mexicanas y a sus hijos. 

LA GRÁFICA DE HOY 

Nos habla sobre la triste realidad en la que mientras miles de familias festejaron a sus mamacitas, otras miles de madres, decidieron tomar las calles del país, pues no tienen nada que festejar, ya que, buscan a sus hijos desaparecidos o sus hijos buscan a sus madres que nunca regresaron a sus hogares, una realidad dantesca en México y que lleva muchos años siendo ignorada por las autoridades. 

Y es que, no solo hablamos de los cientos de muertos todos los días en el país, sino de las decenas de personas que desaparecen todos los días, dejando un dolor enorme en sus familias, una incertidumbre que consume y una impotencia enorme por no saber dónde se encuentra el ser querido, saber si sigue con vida o si ya falleció, una tortura que ninguna madre, padre, hermanos o hijos deberían vivir. 

Por lo anterior, es que varias ciudades fueron el escenario para la en la XII Marcha de la Dignidad Nacional, encabezada por madres buscadoras que, exigen la localización de sus hijos desaparecidos y un alto a la violencia que viven madres buscadoras, ya que, en los últimos años han asesinado a siete de ellas. 

En México se registran 112 mil desapariciones, más de 10 en los últimos años, con un promedio de 32 personas reportadas al día como desaparecidas y que no han sido localizadas, una verdadera tragedia que no puede seguirse tolerando en una nación que se jacta de vivir con leyes, democracia y libertades. 

Así que, toda la solidaridad con las madres o familiares buscadores, nos sumamos, como desde hace mucho, a su exigencia para que las autoridades hagan su trabajo y garanticen que México sea un país más seguro y en el que todos puedan regresar a sus casas con tranquilidad, no el México de los 112 mil desaparecidos que representan 112 mil tragedias familiares. 

GRILLANDO

Y VA DE CUENTO 

Un perico de nombre Pepito se traga las pastillas de Viagra que su dueño POLO MONTES DE OCA había dejado distraídamente a su alcance. 

Cuando POLO se percata de lo que había pasado, decide meter al perico Pepito en el congelador para calmar sus calenturas.  

Una hora más tarde, el hombre decide abrir la puerta del congelador y se encuentra al papagayo empapado en sudor, por lo que le pregunta: Pero, ¿cómo puedes estar sudando en el congelador?    

Y el perico le responde: ¿Tú crees que es fácil abrirle las patas a una gallina congelada? 

HASTA mañana con más GRILLANDO. Comentarios en Twitter en @pepenader y en [email protected]