GRILLANDO
- José Elías Nader Mata
- 24 enero, 2023
- Columnas
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No hay país que esté libre del crimen y de la delincuencia, fenómeno que existe desde que el hombre habita la tierra, donde la codicia invade a la gente mala que quiere las cosas de forma fácil por lo que no les importa joder a los demás.
Sin embargo, hay naciones que actualmente han logrado controlar la inseguridad y en las que se vive dignamente, caso contrario a México donde año con año estamos peor, pues el crimen organizado se ha adueñado de nuestro territorio con la complicidad de determinadas autoridades a las que no les interesa que vivamos de esta forma, pues además el negocio con los criminales es millonario.
En el crecimiento de la inseguridad y del crimen, se han roto todo tipo de códigos, siendo el principal que a los malandros no les importa meterse con mujeres, niños, adolescentes, jóvenes o personas adultas, una línea delgada que se ha roto ante la mirada inerte de los gobiernos que constitucionalmente están obligados a garantizar la seguridad de todos.
El sábado por la mañana una joven compañera de El Valle me marcó en medio de lágrimas y susto para platicarme que acababa de ser presa de un ataque en un camión del transporte público cuando viajaba tranquilamente de Toluca a Lerma para ir a ver a su familia y donde lamentablemente quisieron drogarla.
Al ir a bordo de un camión de la línea Valle de Toluca con número 102 y matrícula 718367- J, a la joven se le hizo extraño que se subiera a su lado un hombre con doble cubreboca y chamarra gruesa, cuyo cuello se subió hasta los ojos para después sacar unos líquidos con lo que según esto se puso a jugar, sin embargo, el olor fue fuerte y en cuestión de un par de minutos la joven empezó a sentir mucho sueño y sentir el resto del cuerpo dormido, por lo que se levantó para salir, pero el hombre no la dejaba pasar.
Afortunadamente una señora se dio cuenta de lo que estaba pasando y auxilió de inmediato a la joven, momento en el que rápidamente se bajó el señor ante la mirada del chofer que dijo desconocer lo que estaba sucediendo. Ante estos hechos y más adelante, la joven y la señora también se bajaron para comprar un café y contrarrestar los efectos de la droga que había olido, un acto heroico de la señora ROSARIO que prácticamente fue el ángel que evitó un secuestro, una violación o algo más grave.
Personal de la Secretaría de Seguridad se comunicaron con la afectada para tomar nota de este caso, sin embargo, queda claro que hay criminales que están operando de esta forma por lo que toda mujer que se suba al transporte público del Valle de Toluca puede ser víctima de ser drogada sin darse cuenta y en cuestión de segundos, de ahí que sea urgente que las autoridades tomen cartas en el asunto, pues no sabemos si son criminales solitarios, si son parte de alguna banda de secuestradores, de trata de personas y si los operadores o los propios concesionarios están coludidos con estos desgraciados que se sienten con el derecho de disponer de la vida de una mujer.
La señora ROSARIO es el ejemplo de que en este país la gente buena puede hacer la diferencia y por esa gente vale la pena trabajar, esforzarse y cambiar las cosas, así que mucha precaución con la forma de operar de estos criminales capaces de someter a sus víctimas de inmediato y sin que uno se dé cuenta, así que confiamos en que pronto se llegué al fondo de esto y los criminales sean detenidos, pues ellos seguirán operando.
LA GRÁFICA DE HOY
Del fotógrafo JAIME ARRIAGA, es de los centros de recolección de árboles de Navidad para que puedan ser reciclados y no pasen a ser parte del nefasto escenario urbano en el que son arrojados a parques, camellones, banquetas o terrenos, algo que vemos constantemente y que se quedan ahí por meses y hasta por años.
Por ello, es que en el Valle de Toluca tanto autoridades estatales como municipales han puesto a disposición de la ciudadanía centros de acopio de árboles de Navidad, lugar en el que deben ser depositados los árboles que adornaron nuestros hogares aunque esto implique subirlos nuevamente al auto y llevarlos a estos lugares, de lo contrario, trompetillas y cremas a todos aquellos que tiren en la vía pública sus arbolitos, pues al final todo se resume en educación, consciencia y respeto.
Y VA DE CUENTO
Dos amigos están en un antro de Metepec cuando en eso ALDO ADAYA le pregunta a RODRIGO INIESTRA: ¿La salida?
RODRI le responde: Esa rubia de ahí.
ALDO le responde: No, la de emergencia.
Y RODRI le comenta: Aquella gordita de ahí.
HASTA mañana con más GRILLANDO. Comentarios en Twitter en @pepenader y en [email protected]