GRILLANDO

Una de las cosas que detesto es el humo del cigarro, posiblemente porque desde niño me vi condenado a ser fumador pasivo, ya que en esas épocas no existían restricciones y la gente fumaba hasta en los hospitales, cines o aviones.
Mi carnala, que fuma como chacuaco, desde chamaco me condenó a despertar con el “inche” cigarro y dormir con él, después en el periódico las oficinas estaban llenas de humo, pues a los periodistas de antaño les encantaba fumar, entre ellos mi padre que se echaba hasta dos cajetillas de cigarros sin filtro al día, algo que al final fue el motivo que le costó la vida.
Durante más de 20 años viví solo hasta que llegó mi pequeña hija, y a pesar de eso a mis amigos no les gustaba ir a la casa por una simple razón, tenían prohibido fumar, pues como lo dije anteriormente, detesto el humo del cigarro, su olor y los daños que genera a la salud, pues según la Organización Mundial de la Salud, más de 8 millones de personas fallecen a causa del tabaco anualmente, 7 millones al consumo directo de tabaco y alrededor de 1.2 millones son fumadores pasivos, es decir, que se tienen que chutar el humo de los irresponsables que sí lo hacen.
Y a pesar de que se ha evolucionado legalmente para garantizar los espacios libres de humo y cigarrillo, lamentablemente al aplicar la Ley existen muchas fallas, pues infinidad de lugares y comercios se pasan por el arco del triunfo las disposiciones en materia de salud y uno tiene que seguir aguantando el humo de los fumadores, aquellos que además tiran la ceniza y las colillas a la calle, los que fuman en la playa y dejan sus colillas en la arena, los que sabiendo que no deben fumar en determinados lugares lo siguen haciendo, pues se creen con un derecho que termina en el momento que se topan con una persona que no fuma.
Así que ojalá se aplique la nueva Ley General para el Control del Tabaco y su Reglamento que contempla puntos como el hecho de que en ningún restaurante, antro, bar o terraza se permitirá una sección de fumar; queda prohibida la publicidad del cigarro; no está permitido fumar en estadios, arenas, salas de conciertos, deportivos, parques y en cualquier espacio de concurrencia colectiva sea cerrado o abierto; no se puede fumar en hoteles, playas y palapas y queda estrictamente prohibido fumar en escuelas, universidades o transporte público, entre otras medidas que me parecen extraordinarias y que como dije anteriormente, esperamos que se respeten.
Quien se quiera morir por un vicio tan nefasto como el tabaquismo está en su derecho, aunque esto le cueste al Estado y a todos los que pagamos impuestos millones de pesos por atender a la gente que se enferma por lo mismo, sin embargo, insisto que su derecho termina cuando hay una persona que no fuma, algo que no es ni tema de debate, pues aquí se trata de respetar la salud de aquellos que sí se preocupan y trabajan en tener buenos hábitos.

LA GRÁFICA DE HOY
Es del lamentable accidente que se registró en Naucalpan en el que tres personas perdieron la vida y más de 30 resultaron heridas después de que un microbús se impactara contra un par de vehículos y cayera en un barranco, algo que quedó registrado en las cámaras del C5 en la que se observa el exceso de velocidad con la que era conducida la unidad del transporte público.
Obviamente este caso ha causado una enorme indignación, ya que una vez más queda al descubierto el caos que impera en el transporte público mexiquense donde la mayoría de los concesionarios y choferes siguen haciendo lo que se les pega la gana, manejando como locos y ocasionando accidentes todos los días.
Una vez más, queda al descubierto que el secretario de Movilidad, Luis Gilberto Limón, ha tenido un trabajo deficiente y que lejos de solucionar el tema del transporte público lo ha empeorado, algo terrible, pues más de 17 millones de mexiquenses merecemos tener un servicio de calidad, a buen precio, seguro y que deje ser sinónimo de muerte y desgracias.
El día que haya mano dura contra los concesionarios y choferes del transporte público, el día que se les aplique la norma y se les obligue a cumplir con la Ley, estaremos transitando por un servicio digno, no la actual porquería que de la mano de la corrupción le ha costado la vida a cientos de personas a cambio de que unos pocos se sigan inflando los bolsillos de billetes llenos de sangre y de lágrimas.

Y VA DE CUENTO
Estaba PITT CABRERA en un viaje de negocios y leyendo el periódico en la habitación del hotel, se fija en un anuncio de una guapa scort que ofrecía sus servicios. Decidido, descuelga el teléfono y llama al número. Al otro lado, se escucha una voz de mujer muy sensual: -Dígame.
– Quiero que vengas a mi habitación. Necesito una mujer esta noche, quiero hacerte el amor varias veces. ¿Qué me dices?
– Señor, para realizar llamadas fuera del hotel, pulse el cero y espere a que se escuche tono…

HASTA mañana con más GRILLANDO. Comentarios en Twitter en @pepenader y en [email protected]

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