“Las personas que tienen una rutina deportiva en su día a día tienen una mejor calidad de vida, frente a aquellos que tienen hábitos sedentarios; sobre todo, la práctica de ejercicio físico ayuda a prevenir enfermedades no transmisibles”
- Pedro Eric Fuentes López
- 4 octubre, 2022
- Columnas
- 0 Comments
En infinidad de ocasiones resulta más atractivo y necesario estar en posición de alerta y no extrañarnos de nada de lo que ocurre a nuestro alrededor, a que nos tomé por ventaja una persona, un grupo o una colectividad que va en contra de principios y valores que arropamos desde siempre. La humanidad sufre en estos instantes -y desde siempre- los embates de los cambios y sus realidades, de lo bueno y malo que traen consigo, pero que, infortunadamente, normalmente navega por la trasgresión, el conflicto de intereses y los altos estándares de hacer valer leyes que sólo implican a unos cuantos y que, quienes en su afán o intentona de revolucionar un todo, se estrellan y comienzan a dar tumbos, reparten leña para que se avoracen los demás y se manche de gris, se tiña de sangre y sufrimiento la sed de triunfo, ese que de pronto se cuelgan muchos más que ni siquiera saben algo de la materia y que, lamentablemente, dadas las condiciones por las que atravesamos en estos instantes en el país, hoy en día es innegable pensar qué podemos hacer y rehacer por el bien de la nación y rescatar, promover, fortalecer en materia deportiva y cultura física. Se habla mucho y no se avanza nada, o incluso, hasta se retrocede cuando seguimos viendo pleitos de vecindad, donde Chana le tira la toalla a Juana y viceversa; en esto se ha convertido el sistema deportivo mexicano, en un manoseo de unos cuantos y quienes salen a dar la cara a veces reciben el portazo en la nariz, aun cuando cuentan con el respaldo de miles que ya están y estamos hasta la madre de tanto cinismo y melcochadas.
El deporte forma parte de las políticas públicas de los estados con su correspondiente estructura municipal, estatal, federal y a nivel mundial tiene organismos internacionales como el Comité Olímpico Internacional, federaciones, asociaciones y clubes, entre otras, entonces claro que es posible generar un verdadero y heterogéneo cambio, apostar a un esquema de globalización del devenir del deporte mexicano moderno que implique un proceso histórico de integración total en los ámbitos económico, político, tecnológico, social, cultural, etc., para convertir o realmente forjar a México, al EdoMéx, en un lugar cada vez más interconectado capaz de crear un gran impacto en la vida y sus esferas familiar, colectiva e individual de las personas. Las estructuras y relaciones estarán definidas por una auténtica autoridad que existe en cada grupo, sociedad o civilización, sólo es cuestión de saberse aplicar y multiplicar esfuerzos, compaginando juventud y experiencia, regando aporte y experiencias vividas, no haciéndose los sufridos, heroicos ni estoicos, lo que necesitamos todos es una real, auténtica y eficaz continuidad de la formación en el deporte social, escolar, amateur, alto rendimiento y profesional, porque todo esto produce cambios en la ética deportiva de cada entidad y personajes que marcan la presencia de nuevos actores y nuevas relaciones económicas y políticas administrativas.
Ahora bien, no es rollo ni choro cualquiera, es un tema de integración y evolución, de desarrollo y crecimiento, pero mejor todavía de una incesante difusión de valores y usos sociales del deporte, aquellos que realmente transforman, implicando a miles de personas que nunca han practicado ni practicarán deporte: los espectadores y sobre todo los telespectadores. El deporte es uno de los fenómenos más populares de nuestro tiempo, basta ver lo que causan ejemplos claros de Saúl Álvarez, Lorena Ochoa -retirada- y recientemente las conquistas este fin de semana pasado de Paola Longoria en el raquetbol y Sergio Pérez en F1, para dejar en claro que el deporte es un transmisor de bienes en las distintas etapas de vida de las personas, porque insisto, se desarrollan destrezas físicas, mentales, emocionales, promueve la socialización y la diversión, así como la interacción entre grupos y de forma individual pero que eso implica equipos multidisciplinarios, situaciones que crean sinergia para seguir -a diario- aprendiendo a jugar limpio, mejorando la autoestima, buscando alternativas para generar buena salud y por ende mejorar la calidad de vida.
Sí, ya sé, a veces imagino y sueño demasiado con éstas y otras mejoras, pero si no comenzamos desde nuestras trincheras, entonces ¿cuándo? ¿quién? ¿quiénes? ¿dónde? Lo que apunto tan sólo es una idea de un proceso objetivo, no una ideología; es aquel que deba ser irreversible, ese que se entienda como parte del diario dinamismo y la proyección directa del devenir del ser humano, del deportista y de la sociedad.
Pásenla bien!!!