Acude Del Mazo a la Imposición del Palio Arzobispal de Monseñor Raúl Gómez

Toluca, Méx.- El gobernador Alfredo Del Mazo Maza, acudió a la Catedral San José de Toluca, para acompañar al Arzobispo Metropolitano de Toluca, Monseñor Raúl Gómez Gutiérrez, a recibir la Imposición de Palio Arzobispal, entregado a todos los arzobispos en sus respectivas diócesis.
Acompañado por su esposa, Fernanda Castillo de Del Mazo, el mandatario estatal presenció la ceremonia en la que estuvieron presentes el arzobispo primado de México, Carlos Aguiar Retes; monseñor Francisco Javier Chavolla Ramos, ex arzobispo de Toluca; así como diversas autoridades del Gobierno estatal, civiles y religiosas.
Tras recibir el Palio Arzobispal, Monseñor Raúl Gómez agradeció al gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo por su presencia y participación en esta en carestía, al igual que a su distinguida esposa.
“Hago un reconocimiento de su espíritu cristiano y de su perdón eucarístico, sabemos de sus grandes e importantes ocupaciones, lo cual me hace valorar más el haber tomado tiempo para estar en esta asamblea litúrgica”, dijo.
Asimismo, el Arzobispo Metropolitano de Toluca agradeció por los apoyos que de manera permanente ofrece el gobernador mexiquense a los sacerdotes y religiosos feligreses de esta Arquidiócesis. “Que el señor les recompense”, expresó.
Al recibir el Palio Arzobispal, monseñor Raúl Gómez adquiere un mayor compromiso de servicio y trabajo pastoral con los fieles y con los obispos de la provincia eclesiástica de Toluca, a la cual pertenece la Arquidiócesis de Toluca, así como las Diócesis de Atlacomulco, Tenango y Cuernavaca.
Está prenda litúrgica es una especie de estola Blanca circular que se lleva sobre los hombros y de la cual penden ante el pecho y en la espalda, dos tiras rectangulares; la confección de los palios está reservada a las Monjas Benedictas del monasterio de Santa Cecilia. Lo elaboran con la lana de dos corderos blancos que se bendicen todos los años el 21 de enero en la Iglesia de Santa Inés.
Cabe destacar que el Palio Arzobispal lo bendice el Papa Francisco el 29 de junio, solemnidad de los santos apóstoles Pedro y Pablo. Es un símbolo de unidad entre los arzobispos y el obispo de Roma para trabajar juntos como instrumentos de comunión y hermandad en la iglesia; es un signo que representa la oveja que el pastor lleva sobre sus hombros como Cristo, Buen Pastor de la comunidad.