Avanza la lucha por la salud en Nicolás Romero
- Redacción
- 29 abril, 2022
- Municipios
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Nicolás Romero, Méx.- Gracias a la lucha constante, a la participación decidida, esfuerzo y solidaridad de la población organizada en torno a nuestro incesante movimiento, es como se van obteniendo los logros que representan para las comunidades humildes, la posibilidad de acceder a mejores servicios que satisfacen los derechos que históricamente han sido prácticamente inalcanzables.
Así sucede hoy con los primeros pasos para lograr el reconocimiento de los cuatro centros de salud que nuestra organización ha logrado construir en las comunidades de “Casa Vieja” Cahuacán, Azotlán, Wenceslao Victoria Soto y Ricardo Flores Magón, en Nicolás Romero. La tarde de este día, el dirigente seccional del Movimiento Antorchista en el noroeste mexiquense, maestro Héctor Javier Álvarez Ortiz, en compañía del licenciado Armando Navarrete López, presidente municipal, realizaron un recorrido por estas instalaciones destinadas a la atención y prevención de la salud, con el propósito de conocer el estado en que se encuentran actualmente, realizar las adecuaciones correspondientes y posteriormente integrarlas al sistema municipal de salud, para que de esta manera, comiencen a funcionar.
En un municipio, donde existen 84 mil personas sin acceso a los servicios de salud, cifra que representa el 18.8% de la población y donde viven aproximadamente 220 mil habitantes que no tienen acceso a la seguridad social, el 49.3% de la misma, resulta urgente que se atienda y resuelva esta problemática que afecta, como siempre, a los que menos tienen. Estos centros de salud, representan el esfuerzo de nuestra organización para disminuir las calamidades a las que tiene que enfrentarse cotidianamente la población trabajadora de nuestra demarcación.
A pesar de contar con una infraestructura, en algunos casos, de mayor magnitud, con respecto a otros que funcionan en el municipio, no han podido ofrecer un servicio adecuado, hasta el momento, debido a la falta de reconocimiento y apoyo de los diferentes órdenes de gobierno; por tanto, el que este día, el presidente municipal, licenciado Armando Navarrete López, haya realizado un recorrido para conocer de cerca las condiciones en las que se encuentran, representa, por un lado, su voluntad política para trabajar con las organizaciones sociales y, por otro, la posibilidad de que, al recibir un reconocimiento oficial, se puedan contar con los médicos, personal de salud y medicamentos suficientes para que en breve, comiencen a dar un servicio digno a la población que así lo necesite.
Algunos de estos centros de salud comunitaria, como el que se encuentra en la comunidad de “Casa Vieja” en Cahuacán, dada la indiferencia gubernamental, dieron un ejemplo de lo que puede hacer la población cuando se organiza y está decidida a materializar sus proyectos. Bajo la dirección de nuestro movimiento, la población realizó el llamamiento a la solidaridad y consiguió en donación, los medicamentos necesarios y, además, el personal capacitado para comenzar con la atención especializada; es así como se pudo asegurar el servicio, no solamente de un médico cirujano, sino también de especialistas para las áreas de psicología y odontología; todo por una cooperación voluntaria, realmente simbólica.
Ahora, con el compromiso de la apertura oficial, los habitantes de esa comunidad y las de los alrededores, podrán acceder a los servicios de salud de forma gratuita ya que, los gastos deberán correr, como debería de ser, a cargo del gobierno, quien es el primer responsable de garantizar la salud de los habitantes tal y como está estipulado en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
La posibilidad de la próxima apertura de los centros de salud es una muestra de la justeza de las demandas que defiende y enarbola el Movimiento Antorchista; en ellas, se ven reflejadas las verdaderas necesidades, las carencias más apremiantes de la población humilde de nuestro país. Atenderlas y resolverlas, se convierte en un acto de justicia ya que es el pueblo el que sostiene con su trabajo cotidiano, todo el andamiaje de la sociedad.
De la misma manera, esta posibilidad también demuestra que la defensa del derecho a una vida digna, se da en la lucha constante, firme y sin vacilaciones, no para conseguir migajas, sino para lograr los servicios de calidad necesarios para quienes más lo necesitan. Es indispensable entonces, no claudicar en el esfuerzo, reforzar nuestro movimiento con la unidad, disciplina y educación política necesaria para lograr comprender que la lucha por nuestros derechos es un pequeño avance; que sólo cuando logremos construir una sociedad verdaderamente humana, se resolverán todas las calamidades que padece nuestra sociedad.