LA SANGUIJUELA DE LA NACIÓN SIN DUDA, LA CDMX

Yo sé que todos los que vivimos en nuestro país somos mexicanos, somos connacionales que tienen fines en común y que a todos los que vamos sobre este mismo barco nos va de la forma similar a todos, si hay lozanía es en todos, si hay crisis en todos, si hay deflación a todos nos afecta, si el dólar sigue arriba de los 20 pesos, igual, a todos nos va a ir.
Claro y lo entiendo, eso por haber nacido en un verdadero país que es tocado por el dedo de dios, en donde nos encontramos en una región por demás benéfica con respecto a los demás países del mundo, pero se encuentra aún en niveles de tercermundismo, y todos de ello lo adolecemos.
De la misma forma adolecemos de corrupción, de analfabetismo, de políticos que son lobos del hombre por el hombre, de manipular las leyes a beneficio de pocos y pagado por todos los demás, en fin, son miles de pecados y de karmas los que debemos de estar pagando por haber nacido en esta nación de la cual para nada estoy reprochando, ya que mi nación me encanta, pero de la misma forma basta que unos estemos manteniendo a otros.
Hablo al respecto de forma particular de lo que tenemos todos los mexicanos que estar manteniendo de nuestra capital de “todos los mexicanos” de un territorio que desde su origen se le llamó Distrito Federal y ahora se dignan llamarse Ciudad de México, en la escuela desde siempre nos han enseñado que conforman a nuestra república mexicana estados y un distrito federal ahora ya no, ese dichosos distrito federal de antaño, no se considera estado y se consideraba como un territorio federal, un área de todos los mexicanos porque ahí se encuentran los poderes de la nación, no es una entidad autónoma, sino en gran parte y en diversos rubros es mantenida por todos los mexicanos, de todas latitudes y de todos los rincones de nuestra nación, pero de ello ya basta.
En otro espacio tocaré el tema y cito en este momento, como lo es que ahora ya pretenden los capitalinos, o mejor dicho el propio gobierno federal llenarse más agua de otros lados al D.F., ahora del hermoso río de Temascaltepec, que se pretende entubar para llevarla a la antigua Tenochtitlán, y es algo que los mexiquenses decimos “ya basta”, en el sentido de que ya desde hace varias décadas instalaron en nuestro territorio, en nuestra entidad el llamado Plan Cutzamala que se lleva miles de litros de agua por segundo hasta la “CDMX”, y ahora quieren llevarse más y más, pero bueno, eso es tema de una columna en lo particular.
El hacinamiento de gentes en la ahora Ciudad de México, que se considera de las ciudades más populacheras de todo el mundo tiene como motivo fundamental de que al ser un territorio federal, no una entidad, los estados en parte lo debemos de mantener, y por ende, varios de los servicios son subsidiados por todos los mexicanos a través de nuestro gobierno federal, y al hacer la vida más simple y barata es de los problemas fundamentales de que millones de gentes vivan ahí; hasta el nivel de que de las 56 etnias que conforman a nuestra nación, de todas ellas hay representaciones de ciudadanos en esta ciudad.
En fin, eso es un problema que desde varios años desde este nuestro espacio lo hemos estado tocando pero ahora hay que tocar y poner en la mesa del análisis uno de los descalabros más lacerantes que tenemos los mexicanos y más en esa ciudad que de por sí al estar tan hacinados y pocas oportunidades de crecer en lo individual es lógico que suceda y que debe de asustar.
Los estadistas, aquellos que se dedican a analizar porcentualmente todo tipo de fenomenología social es el de la educación de los adolescentes, de aquellos que están despertando a la vida y se encuentran truncados sus proyectos y sueños, lo que los hace involucionar hasta el inframundo de su existencia, y es que en este periodo escolar que acaba de terminar, y nos encontramos en el dichoso “receso” es que en el antaño D.F. 10 mil adolescentes abandonan las aulas de secundaria en este lugar, esto causado por diversos fenómenos, dentro de ellos situaciones del núcleo familiar, y en casos personales.
Y veamos dentro de este tema de lo que más debe de espantar, lo es que la mayoría de las claudicaciones que existen es por materias de la escuela de las que de plano no entiende ni “j” de que es de lo que le hablan, y no son otras materias más que las matemáticas, el estudio del idioma español y el de ciencias, temas de que por la calidad de vida da en hacinamientos de este tipo es miserable y por ende no se comprende.
Dicho por la asesora de la Administración Federal de Servicios Educativos de la CDMX, afirma que con un promedio 98 por ciento de los alumnos que concluyen el primer grado de secundaria se inscriben al segundo grado, pero más de dos mil quinientos de ellos, no concluyen este básico grado de la educación.
Y bueno veamos de que de segundo a tercero de secundaria, el ochenta y tres por ciento de los que se encuentran en segundo, se inscriben, pero de la misma forma, más de 28 mil no llegan a inscribirse a tercer grado, de los cuales ocho mil son seguros de que no sigan sus estudios.
El cambio de aquellos que terminan la primaria y de los que aspiran a seguir sus estudios de educación básica en la CMX, hay por lo menos siete mil quinientos que no tuvieron oportunidad, por alguna circunstancia familiar o personal, de inscribirse en el sistema, o sea en éste ciclo en el 2019-2020 no podrán estar en un pupitre del que al ser ciudadanos mexicanos tienen derechos.
Y bueno, en donde dejamos al gobierno del antaño Distrito Federal, que es lo que tiene que hacer aquel gobierno para que no existan más y más ciudadanos en las calles y miles de más informales en las calles, no es posible que se quede solo con estas cifras y las pretenda aceptar; HASTA AQUÍ MIS LINEAS…
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