Caída en ventas de libros, pese a reapertura de establecimientos

Toluca, Méx.- La pandemia derivada de la emergencia sanitaria causó severas afectaciones a las librerías, la mayoría cerraron porque no eran negocios indispensables y en cuanto pudieron reabrir la afluencia bajó y la recuperación ha sido lenta.
La caída de las ventas asciende al 25 y 90 por ciento, dueños de librerías en Toluca coincidieron que pese a la incertidumbre en los próximos meses, confían que las ventas de libros escolares, que avanzan lentamente, mejoren el panorama económico de la industria.
José Morelos, mencionó que debido a las estrategias del gobierno estatal, tuvo que buscar otras vías de venta de sus libros como son las redes sociales o a través de sus páginas electrónicas, sin embargo, las ventas no han sido las mismas.
Pese a los esfuerzos por mantenerse a flote, con el cierre de establecimientos obviamente hubo una afectación considerable. Tras la reapertura de actividades, reconoció que la activación va lenta, e incluso con el regreso a clases virtuales, las editoriales también se han visto afectadas, ya que el número de libros que se pedían también disminuyeron, y esto puede ser derivado a que los padres de familia atraviesan complicaciones económicas.
“Las editoriales están pasando por momentos muy duros, obviamente es el sector más importante de la cadena que tiene que ver con la distribución y la venta de libros y los intermediarios que somos nosotros las librerías, y afectó en las escuelas también, ya no están teniendo esa compra de libros como lo hacían anteriormente porque resiente todo, es una cadena, los papás también no tienen dinero los están deteniendo para pedir una cantidad de libros que les pedían antes, esto repercute totalmente en todos los niños, no están llevando todos los libros que llevaban en ciclos anteriores”, dijo.
Debido a la situación y con tal de que no crezca la crisis en el sector, también han optado por ofertar distintos tipos de textos, promociones, impulsar las ventas en línea y hasta enviar a domicilio. Reconoció que la fidelidad al libro impreso continúa.