“El Picoco” y el “Destructor con la nueva sangre del boxeo mexicano

Ciudad de México.- México es un país reconocido a nivel mundial por ser tierra de buenos boxeadores, quienes con su pegada han marcado un antes y un después en la disciplina a la que también se le conoce como las “orejas de coliflor”.
Por eso, la empresa organizadora de eventos conocida como Promociones del Pueblo presumió en redes sociales a Valentín “Picoco” León y a Bryan “Destructor” Mercado, como las nuevas promesas del boxeo Azteca.
Valentín ‘Picoco’ León Jr es de Sinaloa y se prepara su regreso a los cuadriláteros, respaldado por la extenuante preparación realizada y confiado en obtener un triunfo categórico, acorde a las expectativas que ha generado.
León, una de las jóvenes promesas del boxeo mexicano, ha trabajado de sol a sol para su regreso, bajo la atenta mirada de su padre y entrenador Valentín León, que exige al máximo a su primogénito, consciente de su potencial.
El ‘Picoco’ Jr. desea volver al cuadrilátero con una victoria y sabe que es cuestión de tiempo por lo que se dice listo para demostrar su valía.
Con marca de 21-1 y 17 nocauts, el orgullo de Culiacán, Sinaloa; quien milita en la división de los plumas no tiene inconveniente en medir fuerzas con los mejores de la categoría y conquistar muy pronto su primer cinturón.
Por otro lado, el capitalino Bryan “Destructor” Mercado no pierde la brújula y apunta a volver al rombo de combate con una sonora victoria, pues ha entrenado muy fuerte en los últimos meses para conseguirla.
El peleador exclusivo de Promociones del Pueblo, se alista todos los días bajo la instrucción de su padre Ricardo Mercado, quien no tiene miramientos con su hijo y le exige su máximo esfuerzo en cada una de las sesiones.
Bryan con una impresionante marca de 16 triunfos con 14 de ellos por la vía del nocaut; realiza exhaustivas carreras en los parajes montañosos de la Ciudad de México, para complementar su preparación.
La potente pegada del capitalino, va acorde con su apelativo, que a muchos podría parecerles exagerado hasta que lo observan desenvolverse sobre el rombo de batalla.