Familiares exigen justicia para las víctimas del accidente de la Toluca-Zitácuaro

Toluca, Méx.- A dos días del accidente que se registró el pasado sábado sobre la carretera Toluca-Zitácuaro en Almoloya de Juárez, donde perdieron la vida tres personas que viajaban en una camioneta particular, tras ser impactadas por un camión de una empresa refresquera, la familia de las víctimas exige justicia y dar con los culpables.
Mediante un comunicado, la familia precisó que, en la camioneta Jeep viajaban J. Carmen Ríos Alarcón de 69 años de edad, y sus hijos Oscar y Erick Ríos Hernández, de 35 y 41 años de edad, quienes habían ido a trabajar y regresaban a su casa, en Toluca, donde los esperaba su familia.
En un video que circula en redes sociales, se observa cómo el camión de la refresquera, provoca el accidente, ya que iba con exceso de velocidad, invadió el carril y se impactó contra la camioneta Jeep sobre la carretera Toluca-Zitácuaro.
Tras el accidente, las personas que iban a bordo del camión de la empresa refresquera se dieron a la fuga, con la complicidad de un taxista.
Mientras que, dentro de la camioneta fallecieron J. Carmen Ríos y su hijo Oscar. Aunque Erik logró salir aún con vida y ponerse de pie, más tarde murió dentro de la ambulancia de Protección Civil del municipio de Almoloya de Juárez.
Tras la terrible situación, la familia reclama justicia y exige a la empresa refresquera que se haga responsables del fatal accidente que quitó la vida a tres de sus integrantes, al tiempo de proporcionar la información sobre sus trabajadores para dar con su paradero, pues actualmente están prófugos de la justicia.
Cabe mencionar que los deudos se enteraron del accidente por la fotografía de una de las credenciales de elector que una persona subió a redes sociales. Tampoco se ha podido recuperar el celular de una de las personas que lamentablemente perdió la vida, que podría tener información para esclarecer los hechos.
La familia reiteró que, Carmelo, Erick y Oscar Ríos eran gente trabajadora, padres de familia, incluso Erik y Oscar eran fisicoculturistas por deporte y abogados de profesión.