GRILLANDO
- José Elías Nader Mata
- 25 mayo, 2022
- Columnas
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Vaya caos que se vivió en el Aeropuerto Internacional “Benito Juárez” de la Ciudad de México después de que los accesos fueron bloqueados por integrantes del Movimiento Nacional de Taxistas a quienes poco les importaron los pasajeros pues ellos querían protestar por los servicios de transporte por aplicación.
Lo más lamentable es que nuevamente la autoridad brilló por su ausencia y permitió que una minoría afectara a miles de personas, la misma historia de siempre donde las autoridades le tienen un miedo enorme a las consecuencias políticas y no aplican la Ley o la fuerza pública como debería.
Miles de personas perdieron sus vuelos o no podían salir del aeropuerto porque los manifestantes bloquearon las entradas y salidas de las terminales 1 y 2, gente que se vio afectada en su vida laboral o en sus vacaciones porque este tipo de organizaciones ya encontraron en el chantaje y en el joder a los demás la forma de exigir que se cumplan sus caprichos.
Sobre el tema del transporte por aplicación hemos hablado muchas veces pues finalmente la gente lo prefiere porque los taxistas dejaron de prestar un servicio de calidad y digno, por ello es que este tipo de protestas son estériles y deberían tener sanciones contra quienes bloquearon los accesos al aeropuerto, inclusive retirar sus concesiones pues ya basta que por el capricho de unos cuantos se frene el progreso y el desarrollo de todo un país, algo que la autoridad debería entender y respetar para que podamos evolucionar con orden y respeto, de lo contrario seguirán este tipo de movimientos anárquicos que en poco benefician al pueblo mexicano.
LA GRÁFICA DE HOY
Del fotógrafo JAIME ARRIAGA, es de la forma en la que se ha perdido la movilidad en el centro de Toluca cada vez que hay amenaza de protesta y se ponen vallas en los edificios públicos, algo que obliga a los peatones a caminar por la calle, como lo vemos en la fotografía, y que genera un riesgo para todos.
Lo cierto, es que además la imagen urbana del centro histórico se ve realmente afectada pues pareciera que constantemente vivimos en un bunker de guerra donde la forma arquitectónica se ha perdido para destacar las vallas negras o blancas, una verdadera pena pues si algo bonito tiene nuestra querida Toluca es su primer cuadro.
Entendemos que las vallas son necesarias para evitar el vandalismo que de igual forma ha jodido al centro histórico, pero la verdad es que regresó al primer tema de esta columna donde si se aplicará la Ley viviríamos con orden y respeto, no en una anarquía donde la gente por defender sus “derechos” hace lo que se le pega la gana.
Por lo pronto, pues la recomendación a las autoridades de que cuando pongan vallas piensen en los peatones y automovilistas pues de lo contrario se puede generar un accidente, algo que inclusive ya ha pasado ante la falta de visión de quienes ponen estos objetos para “resguardar”.
Y VA DE CUENTO
Llega JUAN PABLO NAVAS y le dice a un amigo: Me siento mal, iré al veterinario.
El amigo le dice: ¿Por qué al veterinario?
A lo que PABLO responde: Porque en mi casa como tal puerco, duermo como burro y trabajo como caballo.
HASTA mañana con más GRILLANDO. Comentarios en Twitter en @pepenader y en [email protected]