AMLO asegura que Tesla tiene interés en instalar una planta en México

Ciudad de México.- Este miércoles, el presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó el interés de la empresa Tesla de abrir una planta en México e indicó que hasta este momento se analizan dos posibilidades: que se ubique en el estado de Nuevo León o en Hidalgo, cerca del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles.

​Desde Palacio Nacional, el mandatario señaló que se están promoviendo actividades para el desarrollo de la industria en el país, en especial para el sector automotriz, destacando que hay lugares que pueden ser opciones estratégicas.

“Bueno, se están promoviendo muchas actividades para el desarrollo de la industria y hay sitios en el país que pueden albergar, pueden ser buenas opciones estratégicas para el desarrollo de la industria, en este caso la industria automotriz con carros eléctricos, el Plan Sonora, lo que se está haciendo en el Bajío, lo que vimos, inauguramos como nueva etapa en San Luis Potosí con la nueva planta de la BMW de carros eléctricos.

Hay también de esta empresa (Tesla) dos posibilidades, según me han informado, que se instale en Nuevo León o en Hidalgo, muy cerca del AIFA”, señaló.

El titular ejecutivo, mencionó que la industria automotriz forma parte de las prioridades del gobierno que está impulsando las energías limpias y el desarrollo de nuevas tecnologías, para cumplir con los compromisos de reducción de emisiones.

Puso como ejemplo la puesta en marcha del Plan Sonora y el anuncio reciente de la nueva planta de BMW en San Luis Potosí. Esta semana, el vocero de la Presidencia, Jesús Ramírez, explicó que la cercanía con Santa Lucía serviría a Tesla tener centro de exportación vía aérea.

El funcionario agregó que las ventas del fabricante de vehículos eléctricos se darían una vez que el parque industrial T-Mex Park, a unos tres kilómetros del aeropuerto, esté funcionando a plenitud.

En otro tema, López Obrador aseguró que la ministra Norma Piña es presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación gracias a él, pues explicó que esto se debe a que no interfirió en la elección interna de la Corte, como presuntamente sucedía en sexenios anteriores.

Tras reiterar que no confía en los ministros de la Corte, López Obrador contó que cuando fue jefe de Gobiern, le preguntaron del Tribunal Superior de Justicia de la capital quién debería ser el nuevo titular.

“Me vienen a ver para que yo diera la línea, como era, les digo: no, elijan ustedes, así está. Pero hasta raro se sentía, no, elijan. A mí me tocaba, inclusive, eso se los cuento después, me tocaba proponer a quienes iban a pasar de jueces a magistrados y les pedía yo que la terna la enviaran del poder judicial y esa misma terna era la que yo enviaba, les digo no, elijan y eligieron”, recordó.

El presidente mencionó que es mejor que exista separación de poderes porque de esta manera si algún juez es corrupto, de esta manera tendría la libertad de acusarlo y no se tiene el compromiso de quedarse callado.

Por otra parte, el presidente no ejercerá su derecho de veto para promulgar las reformas en materia electoral aprobadas en el Congreso, y que entre otras medidas establece que los partidos políticos mantengan en su poder recursos que no ejercieron para utilizarlo en futuras elecciones.

En la actual legislación, los recursos que no son ejercidos deben devolverse a la Tesorería de la Federación y no se reintegran en el siguiente ejercicio fiscal.

Pese a que esa reforma incluida en el paquete de leyes electorales aprobadas por el Congreso es contrario a su política de austeridad, el presidente anunció que no la vetará y dejará que siga su curso hasta llegar a la Suprema Corte y que sea ese órgano el que decida.

“Si yo veto, ahora, imagínense, me van a tachar de dictador. Lo voy a usar para cosas que considere más importantes, porque si no, se me viene la campaña de que estoy actuando de manera autoritaria y vale más que se vaya, como corresponde legalmente, a la Suprema Corte”, recalcó López Obrador.

El paquete de reformas electorales no ha sido aprobado en su totalidad y una vez que suceda, debe ser publicada por el presidente para entrar en vigor y es en ese momento en que puede ser llevada a una controversia constitucional ante la Corte.