HRW acusa a Israel de cometer crímenes de guerra y lesa humanidad 

Gaza.- La organización Human Rights Watch (HRW) acusó al Gobierno de Israel y a su Ejército de cometer crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad durante las operaciones militares realizadas en 2025 en los campamentos de refugiados palestinos de Cisjordania, donde más de 32 mil personas fueron forzadas a abandonar sus hogares desde enero.

Según el informe presentado este jueves, las fuerzas israelíes desalojaron a miles de palestinos sin ofrecer protección legal internacional ni permitir su retorno, lo que constituye —de acuerdo con HRW— una violación grave al derecho internacional humanitario.

“Con la atención global centrada en Gaza, las fuerzas israelíes han perpetrado crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad y una limpieza étnica en Cisjordania”, denunció Nadia Hardman, investigadora senior de la organización.

El informe de 105 páginas documenta la operación militar denominada “Muro de Hierro”, ejecutada entre enero y febrero en los campamentos de Yenín, Tulkarem y Nur Shams.

HRW realizó entrevistas a 31 personas desplazadas, analizó imágenes satelitales y revisó órdenes militares. Los hallazgos confirman la destrucción masiva de viviendas e infraestructura.

Se estima que más de 850 viviendas fueron dañadas o destruidas, cifra que aumenta a 1,460 edificios afectados según una evaluación del Centro de Satélites de Naciones Unidas.

Uno de los testimonios incluidos en el informe revela el ambiente de intimidación durante las redadas:

 “Era como una escena de película. Algunos llevaban máscaras y todo tipo de armas. Un soldado dijo: ‘Aquí ya no tienes casa. Tienes que irte’”, relató una mujer desplazada de 54 años

La organización señala que Israel no proporcionó refugio ni asistencia humanitaria, obligando a las víctimas a resguardarse en escuelas, mezquitas, casas de conocidos y organizaciones benéficas.

HRW solicitó una investigación internacional contra altos mandos militares y políticos israelíes, incluidos: Benjamin Netanyahu, primer ministro; Yoav Gallant, exministro de Defensa; Avi Bluth, jefe del Comando Central; Herzi Halevi y Eyal Zamir, exjefe y actual jefe del Estado Mayor; Bezalel Smotrich, ministro de Finanzas e Israel Katz, ministro de Defensa

La ONG argumenta que las órdenes militares violan el Artículo 49 del Cuarto Convenio de Ginebra, que prohíbe el desplazamiento de civiles salvo por razones estrictamente temporales y bajo protección humanitaria.

HRW pidió a la comunidad internacional imponer presión diplomática y económica sobre Israel mediante:

Embargo de armas, suspensión de acuerdos comerciales, prohibición de comercio con asentamientos ilegales y

cumplimiento de órdenes de arresto emitidas por el Tribunal Penal Internacional

Los campamentos donde ocurrieron las operaciones fueron creados por la ONU en la década de 1950 para albergar a palestinos desplazados tras la creación del Estado de Israel en 1948.

HRW advirtió que estas nuevas expulsiones se suman a un contexto más amplio de represión: aumento de detenciones sin juicio, expansión de asentamientos ilegales; escalada de violencia por parte de colonos israelíes

La organización concluye que las autoridades israelíes no han presentado justificaciones legales para impedir el retorno de las familias desplazadas ni para ejecutar la destrucción masiva registrada.