El chapulín del año

En el lenguaje coloquial se conoce como “chapulineo”, al salto de un partido a otro buscando beneficios personales, pasa en todos los partidos y a todos los niveles. La práctica se volvió tan frecuente, al punto de estar normalizada. 

Sin embargo, al analizar la situación con mayor detenimiento, lo que muestra es una falta de ética e ideología. Es válido cambiar de opinión, todos lo hacemos, y si en algún momento se deja de sentir identificado con el partido en el que se milita o se apoya, es legítimo valorar otra alternativa, pero, si lo que se busca es un cargo o impunidad mediante el “chapulineo”, el acto es reprobable. A continuación, me permito presentar algunos, solo algunos de los casos memorables de este 2024: 

El exgobernador priista de Oaxaca; Alejandro Murat, originario de Tlalnepantla, Estado de México, quien hiciera su carrera política al amparo del expresidente Peña Nieto, en febrero dio la sorpresa al registrarse como candidato plurinominal de Morena. 

De igual forma, en febrero de este 2024, el Partido Verde, partido aliado de Morena, celebró con entusiasmo la adhesión del exgobernador del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas. Cabe señalar que, en 2023, el antiguo priista decidió dejar el partido tricolor luego de formar parte de sus filas alrededor de tres décadas. 

En el mes de agosto, “los senadores chapulines del PRD”; José Sabino Herrera, de Tabasco, y Araceli Saucedo, de Michoacán, se unieron a la bancada de Morena. Aunque el PRD perdió su registro como partido nacional, debido a la escasa votación en las pasadas elecciones, algunos de sus candidatos lograron un lugar en las Cámaras del Congreso. En los spots utilizados en campaña por José Sabino, comentaba que “estaba cansado de los mismos chapulines de siempre” ¿Y entonces? ¿Qué pasó?

Durante este mismo mes, el polémico Pedro Haces fue designado Coordinador de Operación Política del Grupo Parlamentario de Morena en la Cámara de Diputados y se autonombró; “soldado del segundo piso de la cuarta transformación”. Este político, empresario taurino y líder sindical mexicano, fue miembro del PRI desde 1981.

Y como a las mujeres también se les da “el chapulineo”, tras 20 años de militancia en el PRI, Alejandra del Moral anunció que dejaba su militancia para “sumarse” al proyecto de Claudia Sheinbaum. La noticia realmente esperada llegó en octubre, cuando la Secretaría de Relaciones Exteriores, designó a la excandidata a la gubernatura del Estado de México, como directora ejecutiva de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo.

Romel Pacheco, exclavadista olímpico, concretó un triple salto: del PRI al PAN, hasta llegar a Morena. La experiencia política de Pacheco se resume en sus dos últimos años en el PAN, sin embargo, sus primeros acercamientos con la política fueron con el PRI en 2011. En octubre de 2023, firmó un acuerdo para enlistarse en las filas de Morena y de esta manera, emprender su lucha para participar en las elecciones 2024 donde fue derrotado, no obstante, en septiembre fue nombrado director de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE).

“Después de una profunda reflexión he decidido sumarme al proyecto que encabeza la primera mujer Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, en quien confío y me motiva para trabajar por una sola causa: México”, fue lo que comunicó la exsenadora del PRI; Cynthia López en sus redes sociales. El “proceso de reflexión” fue exprés, ya que el 29 de octubre hizo pública su renuncia al PRI, y el 11 de noviembre se anunciaba su llegada a Morena.

En febrero se vivió “la fiebre de los chapulines” y José Chedraui, quien se “formó” en las filas del PRI y fuera excoordinador estatal del comité de financiamiento privado de Enrique Peña en la campaña de 2012 y también mantuviera vínculos con el PAN, dio un brinco certero al Movimiento de Regeneración Nacional para ser candidato a la alcaldía de Puebla, y aunque las inconformidades estuvieron presentes por parte de la militancia, el pasado 15 de octubre tomó protesta. 

Uno más, Javier Corral Jurado, afiliado al PAN desde 1982, gobernador de Chihuahua entre 2016 y 2022. En noviembre de 2023, renunció a su partido y en diciembre del mismo año, “pegó un brinquito” al proyecto de transformación, cuando la entonces candidata presidencial de Morena,

Claudia Sheinbaum, lo presentó como parte de su equipo del proyecto de nación 2024-2030. Actualmente, senador y presidente de la Comisión de Justicia.

Para terminar, Jorge Luis Lavalle, militante de Acción Nacional y quien estuvo encarcelado durante 18 meses (hoy sigue su proceso en libertad), acusado de recibir pagos millonarios por parte de la empresa brasileña Odebrecht, a cambio de dar su respaldo a la reforma energética impulsada por el expresidente Peña Nieto, pero desde hace unos días, secretario de Desarrollo Económico del Estado de Campeche.

Para los que se preguntan qué hay de Miguel Ángel Yunes Márquez, formalmente no pertenece a Morena, pero fue expulsado del PAN al dar su voto para aprobar la Reforma al Poder Judicial y fue designado como secretario de la Comisión de Justicia, una posición que le corresponde a Morena. 

En el mundo académico se conoce como “transfuguismo político”, una manera más elegante de nombrar “el chapulineo”, pero en los hechos se refiere a lo mismo; aquél que pasa de un partido a otro, independientemente de las causas o circunstancias. Este, es uno de los peores vicios que tiene la política mexicana y es necesario detener esta (mala) práctica que tanto daño nos hace.

El listado es tan amplio, que ustedes queridos lectores, tendrán la difícil tarea de elegir quién es el ganador al premio: “el chapulín del año”.