SÓTANO UNO
- Raúl Mandujano Serrano
- 31 octubre, 2024
- Columnas
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La llegada de la Catrina
Raúl Mandujano Serrano. Periodista
Que cada palabra que escribieron,
y cada frase que expresaron,
quede en la memoria de quienes el periodismo amaron.
Y que nunca olviden lo que la escritora dijo:
La libertad es siempre libertad para quien piensa diferente.
No importa de quien se trate,
Solo que sean buenas gentes.
La gente aquí en Toluca,
se emociona, se apasiona y disfruta.
No de sus baches ni del alcalde sus burlas,
sino de su equipo,
su deportivo Toluca.
Hasta la Catrina avienta porras.
Se quitó el sombrero, se puso gorra,
Y pintó sus ojos,
Para gritar el campeonato,
de los poderosos diablos rojos.
En el escenario del poder,
desfilan sin compasión,
las figuras esqueléticas de esta complicada nación.
Unos traen trajes caros y máscaras de cartón,
prometiendo el paraíso, pero es pura decepción.
Otros son marionetas,
manejadas sin pudor,
mientras el país agoniza, en un oscuro terror.
No hubo respiro al Poder Judicial.
Los magistrados renuncian
y la Pelona disfruta y anuncia,
que se acabaron los privilegios
de aquellos que con sortilegios,
vendieron a la justicia.
Fueron años, y en las filas, los caídos aumentan,
mientras la sangre fresca llega, dice la tuerta,
festín en reclusorios y barandillas,
el final de la justicia se acerca.
Yo pensé que eso había ocurrido ya, dice la calavera.
Mientras por El Valle camina,
sonriente entre las escaleras suspira.
Es su tiempo y está vigente;
se trata de la Catrina,
que entre cempasúchil y veladoras,
come, se sacia y se enamora,
de sus víctimas, fieles difuntos,
políticos también,
aunque sean los responsables
de la tragedia,
de mi México fiel.
Con su guadaña portando,
en sus huesudos sus dedos de la mano,
la Catrina va avanzando
hasta la sede del PRI.
Ahí, donde nadie está contento,
quieren cavarle la tumba, a un tal Alito Moreno.
Vuela palomita vuela,
Hasta la sede del PAN,
donde también sus esbirros,
se dirigen a su funeral.
Y quien disfruta de la muerte su paso,
Es Fernández Noroña,
el que fuera candidato.
El que se siente Moreno,
aunque ahí no le echen ni un lazo.
Mientras se reía burlonamente,
la dentada felizmente,
se llevó a ese chamaco,
que se quejaba que en gasolineras,
el uso del baño,
estaba ya a 7 varos.
Y rechinando los dientes,
la esquelética mujer,
se fue buscando periodistas,
para hacerlos perder.
Entre ellos esta Pepe Nader,
solidario y buen amigo,
ni dudarlo ¿pa’ qué?
Entiende que llevárselo, es por su bien,
pues sabe la Calaca,
que para Pepe,
las damas no pagan,
aunque lo hagan enloquecer.
La muerte canta contenta y regocijada,
pues ya se llevó a muchos,
se llevó a Oscar y a Rafa,
a todos allá en Ultra,
incluso al auditorio de la mañana,
a más, muchos más, de los que imaginaba.
Y es que “primero lo primero”,
las noticias de la radio,
le causaron descalabros
y a más de uno un infarto.
Y llegó caminando a la APYCEM,
esa asociación donde periodistas
se lucían para tener,
actividades bonitas, para mostrarse muy bien.
Cuando a Escobar se llevó
La Lupita estaba triste,
deshojando bella flor,
renegaba de los hombres
Y de su suerte en el amor.
“Quiero uno que me seduzca,
que me quiera y que me dé un apachurrón,
que se me enchine todo el cuero,
la rabadilla y el corazón”.
Nadie supo en que momento
ni como sucedió
pero Miriam tan bonita, les cuento,
la Patas de Catre se llevó.
Sus amigas la lloran tanto,
sus amigos poco más,
ha causado tal quebranto,
que les duele hasta el Mictlán.
Al pobre Poncho Acosta.
la “La Garbancera” sorprendió,
estaba editando un programa
cuando la pata estiró.
Ya entregó el equipo,
ya el buen amigo se petateó,
no le puso gasolina al vocho
ni la llanta reparó,
solo le queda pagar cuentas,
y echarse tres de rigor.
Paseando estaba la muerte
con ganas de alguien llevar,
creía tener tanta suerte
que a muchas se podría cargar.
Y se topó con Jaydi, una mujer de paz.
No se percató que como abogada,
evidencias la bella dama,
le tenía para argumentar.
Horacio López,
miedo a la Chirrifusca tenía,
porque la muy desgraciada –decía-
nomás nos lleva, se burla, ríe y evidencía.
Ni tiempo nos da pa’ una “chainadita”.
Y de vestimenta ni hablar,
pa’ vernos algo pulcros,
y llegar a los sepulcros
a entregarles su credencial.
Christian Gómez en “El Mejor Lugar”,
realizaba una entrevista,
a la animadora del mal,
preguntaba del papel tan temido,
que en el Día de Muertos siempre ha tenido
y que la hace destacar.
Reportaje era, para Debraye Deportivo,
pero ella con argumento definitivo,
del “profe” no se dejaría engañar.
Con Abiud Hernández,
el bebedor de mezcal,
la señora de la Guadaña
no tuvo tantita piedad.
reposa en sepulcro oscuro,
privado de cualquier lujo,
gozando de su funeral.
Ahí quedó ese amable reportero,
que se ocultó en las gradas del ruedo,
de la Monumental.
La desdentada había ordenado,
que su imagen se editara con cuidado,
en letra arial, cursivas y en morado,
para que resaltará su nombre en cada epitafio.
Sólo que Paola González,
le cambió todo el tinglado,
le puso ghotam bold y la destacó en dorado.
Su osadía no pudo pasar inadvertida,
por eso en tono enojado,
la agarró fuerte de la mano,
y le arrebató la vida.
A Lu Torres
la Parca no encontraba,
y es que un solo empleo,
la niña no acababa.
Pero al final de la jornada,
aunque oculta en el estadio,
no pudo impedir que la Coatlicue
la tomara de la mano
para llevarla en alfeñique,
hasta el final del arcano.
Un ser de esos amables amigos,
fue José Luis Rodríguez “el puma”,
hombre que sin tanta duda,
se jactaba de no tener enemigos,
pero fue visitado por la Patas de Hilo.
Por eso reposa ya, en el jardín de los periodistas,
donde tienen su cruz,
aquellos que allá en La Luz,
escribieron las noticias,
Y al fin llegó su turno,
al bohemio puro.
A él, a Raúl Mandujano,
la Catrina no lo podía llevar.
porque “en su mente brotaba un torrente
de inspiración divina y seductora”,
porque el periodista, “entre cuerdas de su lira,
describía el verso que suspira,
que sonríe, que canta y que enamora”.
Pero junto a él,
“la Catrina” recuerda,
lo abraza y lo consuela porque,
muchos han partido,
y han dejado su corazón sentido,
pero fuerte, muy fuerte,
por lo que a su lado fue vivido.
…Hasta otro Sótano. Mi X @raulmandujano