GRILLANDO
- José Elías Nader Mata
- 26 junio, 2022
- Columnas
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No cabe duda que la maldad en algunos seres humanos alcanza niveles inimaginables, acciones y prácticas que responden a las de personas enfermas que obviamente no están aptas para convivir en sociedad pues son un peligro latente para todos.
En mi vida me ha tocado ver de todo y ahí es donde he entendido la urgencia de que se reconstruya el tejido social pues sin principios y valores seguiremos enfrentándonos a un sector de la sociedad que está totalmente podrido, gente que lejos de actuar como humanos lo hacen como bestias, de ahí que a estos no se les puedan dar abrazos sino todo lo contrario.
Este fin de semana el señor de Texcoco ERICK LUCIO me compartió una publicación de Twitter donde se observaba a un grupo criminal poniéndose las caras de unas personas que seguramente fueron asesinadas, una escena dantesca donde una vez más queda claro el entrenamiento que los grupos criminales tienen para que puedan asesinar sin ningún remordimiento, algo similar al video donde un criminal se come el corazón de un policía en Michoacán y que refleja las bestias que viven en nuestro país y a las que se enfrenta constantemente la sociedad.
En lo personal, estos hechos criminales y dantescos solo demuestran el enorme miedo que tienen los sicarios y que sacan con una supuesta rudeza que solo demuestra lo enfermos que están de la cabeza, inclusive me acuerdo cuando un amigo comandante de la procuraduría me contaba que siempre que los agarraban se hacían del baño del miedo y no era otra cosa más que el terror que tenían a que les hicieran lo mismo que ellos habían hecho.
Ojalá alguien pudiera mostrarle al presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR estos videos, el de los sicarios poniéndose las caras de sus enemigos o el del enfermo que se comió el corazón del policía, pues posiblemente con esto pueda entender que a esta gente no se le controla con abrazos sino que se le debe aplicar todo el peso de la Ley, inclusive la pena de muerte que debería desempolvarse pues este tipo de monstruos no merece ni estar en la cárcel.
LA GRÁFICA DE HOY
Es del parque Bicentenario de Metepec en donde caminando por sus pasillos y jardines reflexionaba todo lo contrario al México peligroso y decadente del que hablo arriba, pensaba en el México de los niños y los jóvenes que merecen vivir mejor, felices, seguros y con una calidad de vida totalmente diferente a la que tenemos.
Y es que, ayer que llevé a mi amada “Bala” VICTORIA a jugar un rato, en el parque veía a más de mil personas conviviendo en familia, bebés, niños, niñas, adolescentes, padres y adultos mayores que corrían, jugaban, reían y se divertían, un escenario extraordinario para poder ir reconstruyendo el tejido social a nivel nacional que tanta falta hace.
Sin embargo, para que se generen convivencias sanas como de las que hablo, también son necesarios espacios dignos como el Parque Bicentenario y que lamentablemente no son la constante en un México donde la mayoría de los parques, jardines y unidades deportivas se están cayendo a pedazos, se encuentran vandalizados y en pésimas condiciones.
El gobierno ha manifestado que una de las principales estrategias contra la inseguridad es precisamente reconstruir el tejido social y una herramienta fundamental es el deporte, la cultura y el esparcimiento, sin embargo, insisto en que no hay los espacios suficientes y los que hay están en decadencia.
Así que ojalá todos los órdenes de gobierno entiendan que todo es parte de un círculo vicioso que se debe ir rompiendo y donde detalles tan simples como tener un buen parque, unidades deportivas dignas, actividades deportivas, culturales y fomentar la unidad familiar, nos pueden llevar a construir una nación de valores, unida y diferente, una nación donde su gente pueda pasar un buen domingo en el parque y no aterrorizada porque el crimen organizado se ha adueñado de todo.
Y VA DE CUENTO
La maestra de ESTEBANCITO OLIN le pregunta a sus alumnos qué hacían cuando llegaban a la casa por lo que el primero fue PABLITO NAVAS quien contesta: Abro la puerta despacito, cuelgo la mochila, cuelgo mi suéter, saludo a mis papás, a mi hermanito, como y me voy a jugar a futbol.
Y la maestra pregunta: ¿Y cómo te dicen?
Y PABLITO NAVAS contesta: ¡Messi!
La maestra le pregunta a OSCAR DÍAZ: ¿Qué haces cuando llegas a tu casa?
OSCAR responde: Abro la puerta despacito, cuelgo la mochila, cuelgo mi suéter, saludo a mis papás, saludo a mi hermanito, como y me voy a jugar a básquet.
Y la maestra dice: ¿Y cómo te dicen?
Y OSCAR responde: ¡Jordan!
La maestra le pregunta a ESTEBANCITO lo mismo y el chamaco responde: Abro la puerta de una patada, tiro la mochila, tiro el pinche suéter, ignoro a mis padres, le miento la madre a mi hermanito, tiro la comida y me subo al techo a tirarle piedras al vecino.
Y la maestra alarmada le pregunta: ¿Y cómo te dicen?
Y ESTEBANCITO responde: ¡Haz de bajar, hijo de la chingada!
HASTA mañana con más GRILLANDO. Comentarios en Twitter en @pepenader y en [email protected]