Hay 62 municipios del EdoMéx en sequía moderada
- Laura Velásquez Ramírez
- 25 abril, 2021
- Estado de México
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Toluca, Méx.- Basados en el estudio Sequía en México publicado en la página del Gobierno Federal, se informó que en el Estado de México hay 24 municipios están en categoría de seco a normalmente seco, hay 36 en sequía severa, cuatro en sequía extrema y 61 con sequía moderada, que son la mayor cantidad.
Moisés Gerardo Hernández Cruz, quien encabeza la Dirección Local Estado de México de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), puntualizó que Acambay, Aculco y Polotitlán que pertenecen al Organismo de Cuenca Golfo Norte y tienen una clasificación tres en niveles de sequía por lo que se sitúan en situación extrema, le siguen Jilotepec y Timilpan con clasificación dos. También hay afectaciones en las demarcaciones que pertenecen al Organismo de Cuenca Lerma- Santiago- Pacífico en el que resalta Temascalcingo con sequía severa, le sigue San Felipe del Progreso, Zinacantepec, San José del Rincón, El Oro, Jocotitlán, Atlacomulco y Almoloya de Juárez.
En tanto, en el Valle de México en el Organismo de Cuenca y Aguas de la región, mencionó que aún no tienen reporte de sequía severa, sin embargo, está Apaxco, Coyotepec, Chapa de Mota, Huehuetoca, Hueypoxtla, Morelos, Soyaniquilpan, Tepotzotlán, Tequixquiac, Villa del Carbón y Zumpango, los que reportan nivel dos de sequías.
En el sur, los municipios que corresponden al Organismo de Cuenca Balsas no hay demarcaciones con sequía severa pero, se mantienen varios con nivel dos como son Almoloya de Alquisiras, Amanalco, Amatepec, Donato Guerra, Ixtapan del Oro, Ocuilan, San Simón de Guerrero, Santo Tomás de los Plátanos, Tejupilco, Temascaltepec, Tepetlixpa, Valle de Bravo, Villa de Allende, Villa Guerrero, Villa Victoria, Zacazonapan, Luvianos, en estos, hay demarcaciones que son parte de la Cuenca del Sistema Cutzamala, en el que desde el año pasado hay déficit.
De acuerdo con estimaciones de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) el 57 por ciento del recurso hídrico que consume el país se pierde por evaporación pero, sobre todo, por infraestructura ineficiente, en mal estado u obsoleta.
En cuestión del campo, que representa la principal actividad de consumo de líquido en nuestro país, la superficie irrigada es de 6.3 millones de hectáreas y aporta el 42 por ciento de la producción agrícola nacional.
Sin embargo, las pérdidas por infiltración y evaporación ascienden a más de 60 por ciento del agua almacenada y distribuida para fines agrícolas. Una problemática que no ha sido debidamente atendida por las autoridades.