Alzan los puños las futuras promesas del boxeo Azteca

Ciudad de México.- Poco a poco las nuevas promesas del deporte se abren camino entre los que ya se consolidaron, para eso se requiere de mucha paciencia, así como de un arduo trabajo; eso lo saben cuatro pugilistas que desde el amateurismo han dado mucho de qué hablar y que hoy están en camino a convertirse en figuras de la fistiana.
Éstos boxeadores por demás talentosos han vinculado su carrera a Promociones del Pueblo, empresa que dirige Oswaldo Küchle; se trata de los ex seleccionados Eduardo Martínez y Óscar Salgado, así como el duro mexiquense Edgar “Cruzito” González y el esteta queretano Juan ‘Inquieto’ Barrientos.
El capitalino Eduardo Martínez de 20 años milita en la división de los superligeros, y tras ganar cinco medallas en Olimpiada Nacional y ser parte del equipo representativo mexicano; suma 6 triunfos con cinco de ellos por la vía del nocaut ahora en su etapa en el boxeo de paga. Es licenciado en Entrenamiento Deportivo egresado de la Escuela Nacional de Entrenadores Deportivos.
El mexiquense Óscar Salgado de 23 años, es múltiple medallista de Olimpiada Nacional, además de tricampeón del torneo ‘Guantes de Oro’, acumulando cerca de 200 combates que lo llevaron a la selección nacional; ya debutó como profesional y continúa trabajando a tope para mostrar su mejor versión en lo que será su segunda aparición en la escala supergallo. Es licenciado en Administración de Empresas egresado de la Universidad Autónoma del Estado de México.
De la capital queretana y con apenas 16 años, Juan ‘Inquieto’ Barrientos es un chico con amplia trayectoria como aficionado, y que decidió invadir el boxeo de paga porque notó que tenía condiciones y vaya que las mostró al imponerse en una auténtica guerra en su debut en pleito acordado dentro de la división de los paja. Combina el boxeo con sus estudios de bachillerato.
Originario de Toluca, Edgar “Cruzito” González tiene ese poder que caracteriza a los de la capital mexiquense y a sus 20 años suma ya cuatro triunfos sin derrota en el boxeo profesional y se perfila como una seria promesa del peso pluma; donde buscará sacar ventaja de su buen boxeo así como de la excelente forma física que adquiere gracias a sus entrenamientos diarios a más de 3000 metros sobre el nivel del mar.