Introducen a las artes plásticas a jóvenes con Síndrome de Down
- Laura Velásquez Ramírez
- 22 agosto, 2019
- Sociales y espectáculos
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Toluca, Méx.- María de la Cruz Soriano y Sandra Hernández García son mamás de jóvenes con Síndrome de Down, sector que por la discapacidad que tienen los estigmatizan y tienen pocas posibilidades de encontrar un empleo, por lo que a través de la conformación de Fundación Integrarte sitio que los envuelve en las artes y al mismo tiempo, los ayuda a generar ingresos para que sean independientes, productivos y generen recursos económicos para satisfacer sus propias necesidades.
Ambas mamás, coincidieron que lo que nació como un experimento de los mismos papás en la escuela, observaron que los pequeños a través del aprendizaje y habilidad en el arte desarrollaron la autoestima, seguridad, motricidad, pero no solo se limitaron, sino que observaron falta de oportunidades para los niños vieron que el producto de la imaginación podría darse a conocer a los demás y a su vez, generar recursos para los jóvenes con la venta de los cuadros que pintan con sus propias manos.
Con varias exposiciones tanto en el Estado de México como en la Ciudad de México, ambas mamás, indicaron que los niños con discapacidad merecen tener una oportunidad en el sector laboral porque son personas muy productivas. Por lo que por el momento atienden a 6 niños, los papás absorben todos los gastos, sin embargo, el plan es crecer y ayudar a los chicos que no tienen la capacidad financiera de asistir a una escuela de artes dedicada a ellos.
Aseguraron que en la fundación tienen el objetivo de promover la inclusión, por lo que buscan y acercan las herramientas que requieren para que se desenvuelvan ya que cada uno tiene su estilo, tienen mucha sensibilidad y expresividad por medio del arte.
Coincidieron que aunque no tienen apoyo del gobierno ni de otras instancias, cuentan con el apoyo de especialistas quienes de manera altruista ayudan a medir los avances de los pequeños asistentes a través de la aplicación de pruebas y estudios para medir qué tanto crecieron de manera anímica y de habilidades, en lo que aseguraron que desde que iniciaron con el proyecto notaron a sus hijos cada vez más empoderados, con mayor autoestima y manejo del habla, que los hace exponer y describir de qué se tratan las pinturas que hacen y con ello, cierran el trato con la persona, algo que favorece su propia confianza.
Adelantaron que tienen el plan de colocar una galería- cafetería en la que se expongan los cuadros y al mismo tiempo, la gente los vea pintar, un proyecto que catalogaron como cultural, pero de mucha ayuda para los chicos que atiende la fundación que actualmente está en vías de conformación.