EL SÁBADO SE CUMPLEN 195 AÑOS DEL ESTADO DE MÉXICO

Toda la gente sabe que el dos de marzo en las escuelas se celebra ceremonia cívica, que los burócratas del gobierno mexiquense esperan un día de asueto, pero menos del cuarenta por ciento de la sociedad sabe que es por la erección del Estado de México, y mucho menos saben que se celebra este dos mil diecinueve precisamente, ciento noventa y cinco años, de que tuvimos gobernador y que cayó esta responsabilidad en Melchor Múzquiz.
Su erección se debe a que se consumó como todos sabemos la Independencia de México el 24 de febrero de 1821, precisamente el día de la Bandera, cuando se reconoce a la primera Bandera Nacional que fue la del “Ejército Trigarante” a las órdenes de Agustín de Iturbide.
Pero comenzó la duda de que tipo de gobierno sería el de México, si un gobierno Centralista o una República. Si fuera el primero, toda la responsabilidad caería en manos del Presidente Nacional, que sería el que designará a los gobernadores de los departamentos, en lugar de llamarle Estados, ya que dependerían totalmente de la envestidura nacional. Y por otro lado había el proyecto de hacer un gobierno republicano y que consta su estructura en un Presidente Nacional y Estados Libres y Soberanos. Esto fue responsabilidad del Congreso Constituyente que se conformó en 1822, pero les duró poco el gusto, ya que hay que recordar que Iturbide se autoproclama Emperador de México, y disuelva al Parlamento, al Congreso, algo que no le duró mucho el disfrute, ya que al año siguiente se volvió a conjuntar el Congreso, quién definió que sí fuera un Gobierno Republicano.
La primera conformación ya en forma de carácter nacional se dio el 30 de enero de 1824, cuando se publicó el Acta Constitutiva, determinando que los Estados serían 16. Uno de ellos, el Estado de México, con el territorio que tenía la Intendencia Colonial.
Como eran Estados Libres, cada uno debía elegir su propio Congreso Constituyente local, para que formulara la Constitución también local de cada entidad federativa y ratificara, es decir, aprobara en definitiva si esa entidad estaba dispuesta a formar parte de República. Por lo que de inmediato en nuestra entidad se conformó el Congreso Constituyente Local y promulgó su Constitución.
Mientras tanto era responsable de la gubernatura estatal, solamente como interino el Coahuilense Melchor Múzquiz, esto desde octubre de 1823, hasta Marzo del siguiente año cuando se designó como primer gobernador a Manuel Gómez Pedraza, quién por no sé qué acciones tenebrosas y oscuras no aceptó esta responsabilidad y se ratifica al gobernador Múzquiz, por lo que es considerado como el primer gobernador aunque la primera designación fue a Gómez Pedraza.
La primera sede del poder ejecutivo local fue en el Distrito Federal, que pertenecía a nuestra entidad en aquella época y se asentó primeramente en el edificio de la inquisición. Pero después se comenzó a criticar que la ciudad de México fuera de una entidad cuando su logro primeramente prehispánico y luego de la independencia, fue un logro nacional. Y se le segregó este territorio que ahora conocemos como Distrito Federal el 18 de noviembre de 1824 para albergar a los poderes nacionales.
Múzquiz fue gobernador en dos ocasiones en 1824 y luego en 1830, y después llegó a ser presidente de la República en 1832. Pero gracias a estas personas que en los momentos difíciles dieron la cara por un beneficio social, tenemos lo que tenemos, y somos la entidad más importante en todos los rubros sociales y económicos.
El primer Congreso se integró por 21 diputados propietarios y siete suplentes, realizó la primera sesión el 2 de marzo de ese año, de ahí que esta fecha sea reconocida oficialmente como el Día de la Erección del estado de México, en virtud de su carácter jurídico.
Por el Decreto No. 5, del 4 de marzo de 1824, el Congreso local designó gobernador del estado al general brigadier Manuel Gómez Pedraza y como teniente gobernador a Melchor Múzquiz, quien después se encargó del Poder Ejecutivo el 17 de septiembre de ese año.
Así, el Congreso Cosntituyente de 1824 y Melchor Múzquiz dieron vida y figura legal al Estado de México. Su jurisdicción comprendía el actual Distrito Federal, la mayor parte de los estado de Guerrero, Hidalgo y Morelos, así como el distrito de Calpulalpan, perteneciente hoy al estado de Tlaxcala.
Hacia 1824, sus límites se encontraban situados al norte con Querétaro, al oriente con Puebla, al sur con el océano Pacífico y al occidente con Guanajuato y con Morelia.
Sin embargo, la creación de nuevos estados en el siglo XIX y su incorporación a la federación hicieron que el territorio original sufriera continuas segregaciones que se prolongaron hasta 1917, cuando el Estado de México aportó cerca de 2 mil kilómetros para el Distrito Federal.
La capital natural de la entidad era la Ciudad de México, pero al decretarse que ésta sería residencia de los Poderes de la federación, el estado cambió su capital a la ciudad de Texcoco, así como en otros lugares de la entidad y desde julio de 1830, Toluca es la capital del Estado de México, aunque por momentos circunstanciales, hubo otras sedes como lo fueron Lerma, Sultepec y Metepec.
Ya en términos pragmáticos cabe mencionar de que el Estado de México es el verdadero detonante del progreso que tiene nuestro país, siendo el número uno en el Producto Interno Bruto de la nación, es la entidad más populosa, con más de quince millones de habitantes, cuenta con más de once mil empresas privadas en su territorio, sus 22,499,95 kilómetros cuadrados se dividen en 125 municipios, de los cuales tenemos al municipio más habitado de toda la nación como lo es Ecatepec, el más industrializado como lo es Naucalpan, zonas turísticas, se ubican cinco etnias indígenas como lo son la Matlatzinca, Mazahua, Nahuatl, Otomí y Tlahuica
Los gobernantes que han tenido el honor de estar al frente de la dirección de nuestra entidad en toda su historia cronológicamente han sido; Melchor Múzquiz, Manuel Gómez Pedraza, Melchor Múzquiz, Lorenzo de Zavala, Mariano Esteva y Ulibarri, Lorenzo de Zavala, Joaquín Lebrija, Melchor Múzquiz, Lorenzo de Zavala, Félix María Aburto, Manuel Diez de Bonilla, Luis Gonzaga Vieyra, Luis Madrid, Manuel Rincón, Mucio Barquera, Luis Gonzaga Chavarri, Francisco Ortíz Zárate, Mariano Paredes y Arrillaga, Valentín Canalizo, Nicolás Candollo, Gabriel Valencia, Agustín Vicente Eguía, José María Icaza, José Fernando Peredo, Miguel González Calderón, Nicolás María de Berazaluce, José María Barrera, Nicolás Bravo, José Gómez de la Cortina, José Refugio Velasco, Joaquín Beltrán Castañares, Cristóbal Solano, Francisco Murguía, Rafael M. Hidalgo, Gustavo Baz Prada, Pascual Morales y Molina, Rafael Cepeda, Carlos Tejada, Agustín Millán Vivero, Joaquín García Luna, Agustín Millán Vivero, Francisco Javier Gaxiola, Agustín Millán Vivero, Darío López, Abundio Gómez, Manuel Campos Mena, Abundio Gómez, Carlos Riva Palacio, Filiberto Gómez, José Luis Solórzano, Eucario López, Wenceslao Labra, Alfredo Zárate Albarrán, José Luis Gutiérrez y Gutiérrez, Isidro Fabela, Alfredo del Mazo Vélez, Salvador Sánchez Colín, Gustavo Baz Prada, Juan Fernández Albarrán, Carlos Hank González, Jorge Jiménez Cantú, Alfredo del Mazo González, Alfredo Baranda García, Mario Ramón Beteta, Ignacio Pichardo Pagaza, Emilio Chuayffet, César Camacho Quiroz, Arturo Montiel Rojas, Enrique Peña Nieto, Eruviel Ávila Villegas y actualmente Alfredo del Mazo Maza; HASTA AQUÍ MIS LINEAS…
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