EL VALLE DEPORTIVO

“El éxito no es un accidente, el éxito es en realidad una elección”

Cuánto hemos pasado en la creencia de que lo qué hacemos está bien, regular, mal, pésimo, etc.? Me queda claro que un sinfín de ocasiones nos hemos preguntado eso y al mismo tiempo hacemos de nuestros pensamientos, suposiciones, imaginaciones, una herramienta con los afamados 5 segundos de al autodestrucción, sin embargo, hacerlo desde el otro lado del escenario, otorga la maravillosa oportunidad de corregir y enderezar, de soñar y construir, y sobre todo, al abrir los ojos, estirar los brazos, abrir las manos, hacer la mueca sagrada del agradecimiento infinito, esbozar la mejor de las sonrisas y mezclados estos conceptos con sendas ganas de ir pa´lante, no hay poder -al menos humano- que nos coarte la oportunidad de intentar ser feliz, más allá de tan sólo un suspiro o de esos 5 seg., luego entonces, manos a la obra, eslabonas una cascada de ofrecimientos -basta de peticiones- y aunque estés que te lleve la tía Chana, siempre encontrarás un motivo, tan sólo 1 para emprender todas las acciones y obras para conseguirlo, al menos, como dicen mis altamente carnales de vida, luz y esperanza: sólo por hoy…

Y es justamente cuando se mueve el mundo, que en esos -y estos- inevitables giros de la tierra, aparecen en el deporte en cualquiera de sus disciplinas, oportunidades de cambio, generadoras de tracción y evolución, surgiendo a cada instante talentos que únicamente tienen que fijar su mira en el objetivo: trascender, darle la vuelta al mundo, no quedarse estancado en sus zonas de confort, porque la curva del rendimiento en el  deporte es tan impredecible como impactante, a favor o en contra, y se tiene que trabajar total y absolutamente el aspecto mental, porque la mente también se entrena. Así que cuando se ha anunciado que México, a través de los denominados 12 Nuevos Guerreros, la selección de basquetbol, después de su juego frente a Argentina -este lunes- emprenderá el viaje al continente asiático para disputar la Copa del Mundo de Baloncesto, que a decir de Omar Quintero -el estratega nacional- nuestra nación puede dar un golpe de autoridad y sorpresa, siendo que se trabajó bastante bien en el aspecto físico-mental, creando un compromiso sólido y bien fortalecido compaginando entre sus convocados, experiencia y juventud, tesoros que el deporte ráfaga alimenta constantemente.

El Mundial se llevará a cabo en Filipinas, Japón e Indonesia, así que dentro de 24 días exactos comenzará una nueva historia; previo a ello, México a su llegada a Asia disputará la Kings Cup y la Internacional Basketball Week NBA, como parte de llegar bien anclados y unidos al torneo más importante de sus vidas, tal como lo afirma Quintero, y al menos yo, celebro estas palabras y esos deseos de superación constante, sin embargo, también en el realismo más crudo, de eso a salir campeón, se tiene que ir paso a paso y sacar a relucir todo el  trabajo y sacrificio que se hace día con día.

México lleva a un equipo que me aseguran los allegados a Omar, no van de vacaciones, sino que van a ganar con la mística de potenciar como hasta hoy lo que han conseguido, como es el cambio de mentalidad que ya se tiene y que, también, cada día se someterá a más fortaleza para no sucumbir ante la adversidad que pueda presentarse. Con la clara consigna de hacer mucho más que la primera representación de los 12 Guerreros, asisten con toda claridad de no respetar a nadie -en la duela-, enfrentado a jugadores de alto calibre, lo que representa aún más el poder llegar lo más lejos posible. Coincido con Omar Quintero, sus asistentes, la afición mexicana del baloncesto y de todo el gremio, porque también creo que México puede ser el caballo negro en el Mundial, con los siguientes guerreros: Paul Stoll, Jorge Gutiérrez, Moisés Andriassi, Iván Montano, Francisco Cruz, Orlando Méndez, Gabriel Girón Jr., Gael Bonilla, Fabián Jaimez, Héctor Hernández, Jorge Camacho, Israel Gutiérrez, Joshua Ibarra, Daniel Amigo.

Deseo fervientemente que al país le vaya mejor cada día y que en cada momento haya una sinergia capaz de combatir toda corrupción, sacar del fango al deporte y sus deportistas, y darles y dotarles de esperanza para un día de mañana mejor…ojalá que así sea.

Pásenla bien