Prevención, clave para evitar enfermedades crónicas

Toluca, Méx.- Después de los 50 años aparecen diferentes padecimientos que, antes de eso, parecerían poco probables. Esto se debe a que el cuerpo pasa por un proceso de envejecimiento que conlleva el descenso de las capacidades físicas y mentales; por ende, a un mayor riesgo de enfermar. 

No obstante, en la mayoría de los casos, estos padecimientos pueden controlarse con atención médica oportuna, apoyando a las personas a tener una vida con calidad.

El COVID-19 es una enfermedad que permanece vigente, en este momento hay más de 9 mil casos activos confirmados en el país y, según especialistas, llegó para quedarse.

Durante el evento Perspectivas de Innovación en el tercer aniversario de la declaración por pandemia, el Líder Médico de Antiinfecciosos y Antivirales en Pfizer México, Fernando Silva, explicó que el coronavirus posee una alta capacidad de mutación.  Por tanto, se mantendrá durante los próximos años y continuará siendo un foco de atención, especialmente en población de alto riesgo.

En las personas mayores de 50 años, el COVID- 19 puede complicarse con hospitalización en pacientes con obesidad, diabetes, hipertensión y otras enfermedades crónicas.

Afortunadamente y gracias a los avances científicos, existen opciones terapéuticas que actúan a tiempo para evitar cuadros severos e, incluso, el riesgo de muerte en poblaciones vulnerables.

Por este motivo, ante cualquier sospecha, lo mejor es realizarse una prueba y acudir con ella al médico de primer contacto para que, de ser positiva, se tomen las acciones adecuadas.

La segunda enfermedad, es la obesidad, pues se estima que más del 75 por ciento de la población mexicana mayor de 20 años tiene sobrepeso u obesidad, condiciones consideradas como un factor de riesgo para tener diabetes y complicaciones cardiovasculares. 

Y es que, la Federación Mundial de la Obesidad la define como un padecimiento crónico y si bien, a pesar de ser una condición que puede presentarse a cualquier edad, se trata de uno de los principales motivos de consulta entre personas mayores de 50 años.

La obesidad se asocia con, al menos, 14 causas de mortalidad y es el factor modificable más importante para la prevención de enfermedades como diabetes,  hipertensión, accidentes cerebrovasculares, cáncer  y complicaciones graves de COVID-19.

Para controlarla hay que acudir con el médico quien recomendará la mejor dieta y actividad física para cada persona.

También, la diabetes es una enfermedad que se caracteriza por niveles altos de glucosa en la sangre. Cuando no se controla de manera adecuada, afecta a órganos como el corazón, ojos, riñones y el sistema nervioso.  Suele aparecer después de los 45 años y un factor de riesgo muy característico es la obesidad.  La diabetes está presente en aproximadamente el 50 por ciento de la población con obesidad. 

Acudir al médico para recibir una asesoría sobre el tema podría prevenir o retrasar su aparición, especialmente si hay carga genética, pues las personas con un padre diabético tienen alrededor de 40 por ciento de posibilidad de desarrollar esta enfermedad, mientras que, si ambos padres la padecen, el riesgo aumenta a 70 por ciento.

Ante este contexto, la clave es la prevención está principalmente en conocer estas enfermedades y acudir al médico periódicamente para recibir orientación y un diagnóstico oportuno.