En Toluca, parroquia apoya con despensa y ropa a migrantes

Toluca, Méx.- A unos metros de las vías del tren se ubica la Parroquia de Nuestra Señora de los Ángeles Huitzila de Toluca, en la que brindan despensa o ropa a migrantes provenientes, en su mayoría de El Salvador, Guatemala, Honduras e incluso, han apoyado a chiapanecos que buscan el sueño americano, así lo destacó, Manuel de la Mora, párroco del inmueble religioso.
En entrevista, el sacerdote destacó que la Arquidiócesis de Toluca impulsa desde hace muchos años un programa de apoyo a migrantes, que implica brindarles asistencia social, alimento, ropa, descanso y aseo, ayuda en especie, nada de dinero. El objetivo es que estén en un lugar seguro mientras siguen su camino.
De la Mora precisó que, los migrantes pueden acceder a dicho programa en el que los canalizan a los albergues o de asistencia social, pero antes les piden nombre, nacionalidad, motivo por el que salieron de su país y les preguntan si llevan familia o van solos, un cuestionario muy general pero que los ayuda a identificarlos y evitar abusos.
“Debido a que la parroquia de Nuestra Señora de los Ángeles Huitzila está ubicada a escasos metros de las vías del tren, punto de constante arribo y partida de migrantes, por su cercanía los migrantes se acercan al inmueble religioso y piden alimentos”, dijo.
No obstante, el sacerdote señaló que gran parte de los migrantes que se acercan, no quieren dar sus datos, quieren dinero y al informarles que solo les brindan alimentos o despensa, prefieren retirarse.
Mientras que los que sí reciben este apoyo, a un costado se ubica el albergue que atienden las Hermanas de la Caridad y cerca de Bellas Artes hay una Casa de Asistencia Social que atienden las Hermanas de la comunidad de María Siempre Virgen, espacios en los que pueden recibirlos, descansar y alimentarse.
En el caso de la parroquia, solo los apoyan con despensas, aunque no tienen un registro como tal sobre cuántas personas han apoyado con este programa o con despensas, recordó que desde la fundación de esta parroquia hace 50 años han brindado asistencia.
“Gente de Honduras e incluso, de Cuba han llegado a pasar por aquí. Familias completas: papá, mamá, niños, sobrinos, hermanos en deplorables condiciones. Se hace lo que se puede, aquí los ayudamos”, dijo.