El país, peor que antes, dice David Cabañas Barrientos
- Eduardo Muñoz
- 16 mayo, 2019
- Municipios
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La Paz, Méx.- “Lucio Cabañas tomó las armas porque estaba cansado de la podredumbre, el hambre del pueblo, la represión brutal del gobierno y las desapariciones forzadas de personas”, dijo aquí el hermano del legendario guerrillero, David Cabañas Barrientos, quien aseveró que hoy, 60 años después de aquel movimiento revolucionario, “el país está peor que antes”.
Manifestó que él también se unió a la lucha armada el 19 de mayo de 1967. “Me integré a la guerrilla y me fui para la sierra de Atoyac. Yo soy serrano y era muy difícil que los soldados dieran con nosotros. La gente nos apoyaba, nos llevaba comida, nos informaba de cada movimiento, y llegamos a conformar un ejército de 102 campesinos que le dieron batalla a los militares y las policías”.
El hombre habló así durante una larga exposición en la Casa de la Cultura de este municipio, donde estuvo acompañado por los promotores culturales Antonio de Jesús Villanueva, Jorge Vega Oseguera y la directora de la Casa, María Isabel Rodríguez, quienes se reunieron para celebrar el Día del Maestro.
Ahí, ante unas 200 personas que en todo momento se mostraron atentas e interesadas en el relato, Cabañas Barrientos narró cómo fueron los inicios de Lucio Cabañas, su andar por la Normal de Ayotzinapa y su lucha por conseguir justicia, libertad y soberanía para los hombres del campo, quienes “en ese tiempo vestían andrajos, sufrían desnutrición y eran víctimas de represión y asesinatos, lo mismo en Atoyac que en Tecpan, Chilpancingo, Coyuca o San Jerónimo, es decir, la Costa Grande de Acapulco”.
Señaló que Lucio, su hermano, era un líder natural, y logró aglutinar la angustia de centenares de pueblos contra la represión gubernamental, ya que las fuerzas castrenses, encabezadas por Hermenegildo Cuenca Díaz, “mataban a destajo en el agro guerrerense”.
Emocionado hasta las lágrimas, dijo que la guerrilla para cambiar la realidad dio comienzo el 19 de mayo de 1967, tras el sacrificio de 5 dirigentes del Partido de los Pobres en Atoyac de Álvarez. “Nos fuimos a la sierra y logramos aglutinar la inconformidad de los guerrerenses”.
Dijo que a Lucio lo mataron el 2 de diciembre de 1974 en El Ocotal, comunidad de Tecpan de Galeana, cuando tenía secuestrado al candidato Rubén Figueroa Figueroa. A partir de entonces comenzó la “cacería” de luchadores sociales. De hecho el gobierno victimó a cientos de miles de personas. “A mi padre lo mataron y a mi madre y hermana los desaparecieron”.
“A mí me capturaron el 12 de junio de 1990 aquí cerca, en la esquina de Calzada Ignacio Zaragoza y Av. Carmelo Pérez. Estuve 8 años en el Reclusorio Norte, pero desde ahí les dimos batalla, al crear la Coordinación Nacional de Presos Políticos”.
“Hoy –añadió el ponente-, sigo creyendo que México necesita cambios verdaderos, ya que estamos inmersos en un mundo de terror, violencia y asesinatos impunes, donde los ricos abusan de los pobres y el campesino sigue tan marginado como en los tiempos de mi hermano. Es lamentable, pero creo que el país agoniza en la barbarie”.