GRILLANDO

En mi vida chilanga no me quedó otra y tuve que aprender a defenderme y a meter los puños pues eran tiempos donde el “bullying” no existía y el camino era defenderte de los abusos de la gente gandalla, violenta y estúpida.
Cuando regresé a mi querida Toluca viví dos episodios violentos que me hicieron prometer no pelear más, una riña con uno de esos camioneros desgraciados y otra con unos guardias de seguridad donde sufrí una lesión, de ahí que entendí que no iba a pelear a menos de que me tuviera que defender.
Y esto lo platico porque vaya impotencia, coraje e indignación que han ocasionado las escenas de la familia agredida por un par de idiotas en el Eje 3 Oriente de la Ciudad de México por un problema de tránsito el que nunca será justificación para que alguien se ponga de esta manera, menos cuando viene una mujer y una pequeña en el vehículo.
Afortunadamente un adulto mayor, que fue el agresivo y su hijo que se le cerró el paso a la familia con su vehículo, fueron detenidos por elementos de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, después de que la gente hiciera viral este caso y hasta encontrara a los violentos.
Como sociedad debemos bajarle a la violencia pues mucha gente se siete Juan Camaney, golpeador y con el derecho de arreglar las cosas de forma violenta, algo que nos ha dejado tragedias terribles como la del adolescente HUGO CARBAJAL AMARO de 15 años que fue asesinado el pasado sábado por la noche en el salón “Imperio” en Jilotzingo, Estado de México, en manos de un adulto que le propinó un botellazo y que anda prófugo, de ahí que ayer hubiera una manifestación en Periférico Norte en Naucalpan para exigir a las autoridades justicia.
Así que insisto, debemos bajarle a la violencia, grabar, denunciar y hacer virales a los que abusen, se pasen, violenten la Ley y nos quieran robar la paz, algo que no podemos permitir si queremos evolucionar como sociedad pues ya basta que lejos de respetar la Ley y las instituciones pareciera que regresamos a la época de las cavernas y de la Ley del Talión donde la gente se cree con el derecho de hacer justicia en mano propia.

LA GRÁFICA DE HOY
Del fotógrafo JAIME ARRIAGA, es de esta señora de Toluca que de plano tuvo que usar su sombrilla pues estos días se ha desatado una ola de calor en todo el país que está afectando en muchos sentidos como el de la salud de las personas que deben evitar exponerse a un golpe de calor.
Sin embargo, otro tema preocupante lo ha señalado la Universidad de Nebraska-Lincoln, al informar que esta ola de calor dejaría al país sin lluvia por varios días, algo grave pues desde hace meses ya se sufre de una sequía grave en México.
Por este motivo, habrá que considerar dos cosas importantes, la primera, cuidar nuestra salud y la de nuestras familias, tener cuidado de no exponernos a altas temperaturas, de ahí que las autoridades de salud hayan dado consejos como el evitar exponerse al sol, permanecer en la sombra, no esperar a tener sed para tomar líquidos, comer alimentos bien cocidos, evitar tomar alcohol y bebidas muy azucaradas, usar ropa ligera, holgada y de colores claros, evitar el trabajo físico intenso y prolongado y evitar el ejercicio durante las horas de más calor y en el exterior, entre otras consideraciones.
Y por otro lado, entender que de verdad vivimos tiempos de sequía graves y que nos conminan a cuidar el agua más que nunca, de ahí a ser conscientes sobre el uso del vital líquido y bajar nuestro consumo personal, es decir, actuar ante esto que estamos viviendo y que es algo muy serio.

Y VA DE CUENTO
El abuelo GABRIEL ZUÑIGA llama al nieto a escondidas y le dice: En la mesita de noche de tu papá hay un frasquito pequeño con unas pastillitas azules que dice Viagra. Si me traes una pastillita de esas, sin decirle nada a tu papá, mañana temprano te doy 100 pesos.
– ¿100 pesos, abuelo? Eso es mucho dinero, está bien, espérame.
El niño llega a la habitación, coge el frasquito y lee: Via…gra, estas son – y le lleva el frasco al abuelo.
Al día siguiente, el chiquillo se levanta temprano y va a saludar al abuelo.
– Buenos días, abuelo. ¿Cómo dormiste?
– Muy bien, hijo (con una sonrisa de oreja a oreja), y le entrega 1,000 pesos.
El chico, extrañado dice:
– Abuelo, te confundes tú me ofreciste solo 100 pesos.
– ¡Sí, 100 que te doy yo y 900 que te manda tu abuela!

HASTA mañana con más GRILLANDO. Comentarios en Twitter en @pepenader y en [email protected]

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