Tras segundo cierre por el COVID desaparecieron 20% de los restaurantes en EdoMéx

Toluca, Méx.- El próximo 23 de marzo se cumplirá un año de que las autoridades federales implementaron la Jornada de Sana Distancia para combatir la pandemia por el COVID-19; a partir de ese momento se aplicaron diversas restricciones en los restaurantes del país, llegando al cierre de los establecimientos.
Durante estos meses, el impacto a la industria restaurantera ha tenido graves consecuencias, ocasionando el cierre definitivo de 120 mil restaurantes en todo el país y la pérdida de 400 mil empleos; lamentablemente estas cifras siguen creciendo, siendo los más perjudicados los colaboradores.
Tanto el primer cierre de establecimientos como el segundo que se llevó a cabo en el Valle de México a finales del año pasado ocasionaron la desaparición de más del 20% de restaurantes a nivel nacional; de darse un tercer cierre desaparecería el 50%, en primera instancia los más pequeños que no tienen acceso a financiamiento y operan bajo permanente incertidumbre ante la aplicación de más restricciones.
Mauricio Massud Martínez, Presidente de la Cámara de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados en el Estado de México (CANIRAC) refirió que la entidad es uno de los puntos determinantes en el desarrollo de este sector concentrando por si sola el 10 por ciento del total de las unidades económicas del ramo.
“Sólo en el Estado de México hemos visto el cierre definitivo de 12 mil unidades económicas en el último año y pérdidas por 40 mil millones de pesos a lo largo de 2020, este es el golpe más duro que la industria ha sufrido en décadas y la limitación de actividades más prolongada de la que se tenga registro”, dijo.
Ante esta situación, la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC) urge en la necesidad de crear acuerdos entre los distintos sectores sociales y reactivar a este sector fundamental para el país. El propósito es recuperar los 5.6 millones de empleos directos e indirectos que creaba antes de la crisis de salud.
Para lograrlo se requiere del apoyo decidido de los tres niveles de gobierno, generando las condiciones que garanticen el resurgimiento de la industria por medio de incentivos fiscales; respaldo financiero para la obtención de créditos; promover la simplificación administrativa, evitando la sobrerregulación; así como el acceso a vacunas para los colaboradores, acelerando las campañas de vacunación, a fin de brindar mayor confianza en los clientes.
“En la entidad hemos perdido a colaboradores valiosos, a personal preparado, a trabajadores comprometidos y capacitados, más de 40 mil personas perdieron su fuente de empleo y en muchos de los casos su patrimonio al ser empresas familiares que generaban empleos y riqueza en lo local; el llamado a promover la reactivación tiene que ver con toda la cadena productiva que involucra a miles de productores locales que están detrás de cada restaurante.
Es de destacar que antes de esta crisis sanitaria, en un año, la industria restaurantera compraba 100 mil millones de pesos de insumos a productores nacionales, 56% venían directamente del campo”. La Cámara tiene claro que para comenzar la reconstrucción de México es fundamental reactivar al sector restaurantero, por lo que espera que las autoridades atiendan el llamado y, por medio del trabajo conjunto, se implemente una estrategia acorde a los desafíos que hoy se enfrentan. La industria lamenta el cierre establecimientos, reconociendo su esfuerzo por sobrevivir a esta difícil situación, la urgencia de reactivar este sector también tiene que ver con la posibilidad de que algunos de los que ya cerraron puedan reabrir.
Asimismo, reiteró su compromiso de seguir reforzando las medidas de higiene en los establecimientos, promoviendo espacios seguros para clientes, colaboradores y proveedores