Pide la Codhem a los gobiernos, tener cuidado en la apertura a la “nueva normalidad”

Toluca, Méx.- Ante el reinicio de actividades no esenciales anunciado en el marco de la recuperación de la pandemia de COVID- 19, el ombudsperson Jorge Olvera García pidió tener mucho cuidado, pues si los picos de contagios y mortalidad serán a finales de mayo, el mes de junio no es la opción adecuada para una apertura masiva a la “nueva normalidad” propuesta, por ello “la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México invita a la sociedad, a los municipios y al estatal, a proceder con prudencia y mantenernos en espera.”
Al participar en el seminario organizado por la Red Internacional de Estudios Constitucionales en el que se abordó el tema “Derecho a la Salud’, reiteró la postura del organismo defensor contra la discriminación a personas enfermas y expuso que la toma de decisiones se haga con base en las necesidades bioéticas para garantizar el derecho a la salud y en estricta observancia de los derechos humanos.
Explicó que todas las personas deben ser incluidas en las estrategias para atender la pandemia, lo cual debe considerar dos frentes: modelos de la mejor evidencia científica y un enfoque total y absoluto de derechos humanos, para asegurar que las medidas adoptadas incorporen de manera prioritaria el contenido de la protección de la salud.
Olvera García dijo que se debe velar por una distribución y acceso equitativo a instalaciones, bienes y servicios de salud sin discriminación, sean públicos o privados, pues actualmente hay rechazo de enfermos en hospitales de todo el país, y que “la escasez de recursos no justifica actos de discriminación; la Codhem está contra la discriminación en la prestación de servicios de salud”, reiteró.
Asimismo, puntualizó que se debe asegurar la atención médica inclusiva a personas con discapacidad aún en casos de racionamiento de recursos médicos; e identificar, con el mismo propósito a grupos de atención prioritaria: niñas, niños, adolescentes, personas mayores, mujeres, personas con enfermedades preexistentes, privadas de libertad, de pueblos originarios, en situación de movilidad, afrodescendientes, víctimas de violación de derechos humanos, integrantes de la comunidad LGBTTTI+Q, profesionales de la salud, periodistas y comunicadores.
Puntualizó que a nadie se le debe negar la atención médica por estigma o pertenecer a un grupo que podría estar marginado, y los Estados deben proporcionar apoyos específicos, incluidos los financieros, sociales y fiscales, considerando en todo momento a personas afectadas sin seguridad social.
Olvera García recomendó desarrollar y seguir protocolos de clasificación para garantizar que todas las decisiones sean bajo una perspectiva de derechos humanos y no con criterios basados en prejuicios; en este punto, recordó que la Codhem se ha manifestado en contra de las guías que discriminan por edad respecto a quién tiene derecho a la supervivencia.
También comentó la importancia de que las y los trabajadores de la salud tengan los insumos necesarios, así como el equipo, material e instrumentos que protejan su vida, integridad y salud; subrayó que el derecho a la salud se basa en criterios homologados, uniformes y aceptados por la comunidad médica; y se debe adoptar un sistema de medición creíble, verídico y con certidumbre.
Por último, puso a disposición de la RIEC, la Plataforma de la Codhem para publicar las aportaciones de los especialistas participantes de España, Francia, Colombia, Brasil, y México, al tiempo de plantear otros temas a analizar como el referente a las personas adultas mayores y las privadas de libertad, así como hacer propuestas sobre el sistema normativo que debe operar postpandemia.
Olvera García llamó a hacer una profunda reflexión sobre lo qué pasará y las medidas urgentes que se deben establecer, por lo cual propuso llevar a cabo un Congreso en el que se den a conocer las conclusiones de este seminario y se analice la situación posterior al fenómeno social desencadenado por la pandemia.