Vecinos de Chalco bloquean la carretera México-Cuautla

Foto: René Rodríguez

Chalco, Méx.- Desesperados tras 18 días de inundaciones en las colonias Culturas de México y Jacalones II, decenas de vecinos de esta última bloquearon la carretera México Cuautla a medio kilómetro de la caseta de peaje (cerca del acceso a la terminal del trolebús Santa Marta-Chalco), para exigir a las autoridades que “no los olviden”, ya que entre la población han arreciado los problemas de rinitis, conjuntivitis, problemas estomacales y cutáneos.

Ahí, en dirección a México, entre un ruido infernal de traileros y automovilistas que exigían pasar hacia la autopista México Puebla o la vía federal, los inconformes exhibían pancartas en las que externaban su profunda preocupación por lo que está ocurriendo desde hace 18 días en las calles y domicilios de las colonias Culturas de México y San Miguel Jacalones II, donde las aguas negras “no se quieren ir” de las calles y casas.

Según los vecinos, en decenas de viviendas el agua permanece a casi un metro de altura, destruyendo enseres domésticos, muebles y paredes y donde ya “prácticamente es imposible vivir, ya que el olor es nauseabundo, no se puede dormir de ninguna manera y la gente está desesperada por la situación”.

Exhibiendo pancartas en las que se podían leer frases de tristeza, más que de enojo, los agraviados manifestaron que la ayuda de las autoridades ha sido incompleta. No hay suficientes camiones Váctor, no hay comida ni medicamentos y las personas discapacitadas están en peligro de morir por el olor a putrefacción.

Pobladores entrevistados resaltaron que no cuentan con recursos para adquirir botas que les lleguen arriba de las rodillas y tampoco pueden abandonar sus viviendas, ya que existe el riesgo de la rapiña por las noches.

Los vecinos cerraron la carretera desde las 9 de la mañana y, a la una de la tarde, luego de un diálogo intenso con autoridades de la Guardia Nacional, permitieron el paso de vehículos y tráileres, pero solo por cinco minutos. Luego volvían a cerrar por espacio de una hora y abrían cinco minutos, todo ello entre “mentadas” de automovilistas.

El caos vehicular se extendió por más de 5 kilómetros en la carretera México-Cuautla, la libre a Puebla y la autopista México-Puebla. Incluso decenas de pasajeros tuvieron que descender de camiones y combis para caminar kilómetros en busca de otro transporte.

Cabe mencionar que tras la visita de la gobernadora Delfina Gómez Álvarez a la zona siniestrada, decenas de trabajadores y máquinas laboraban a marchas forzadas para desalojar las aguas negras y brindar apoyo a la población afectada.