La violencia vicaria existe desde hace muchos años y apenas se legisla: Amores

Tlalnepantla, Méx.-  La doctora en derecho, Gabriela Amores señaló que si disminuyera la violencia vicaría y la violencia de género, podría haber una reducción en los feminicidios.

Entrevistada luego de su conferencia magistral en el 3er Congreso Latino Americano sobre Feminismo, Género y Derechos Humanos de las Mujeres, dijo que el problema de violencia vicaría existe, y que reconocer que existe sería el primer  paso para enfrentarla y luego disminuirla.

Por ello, consideró que el poder legislativo tiene la obligación de revisar lo que está sucediendo con este incremento de la violencia vicaría, para que hagan los ajustes legislativos y este delito vaya a la baja.

Como ejemplo, citó que en el Estado de México hay sentencia vitalicia para los feminicidas, pero solo un año para violencia vicaría.

Respecto a la sustracción de menores, señaló que en México en 2017 había 5 mil niños sin localizarse y para 2022 la cifra incremento a 16 mil niños desaparecidos, de los cuales, el 60 por ciento fueron sustraídos por familiares o progenitores y de estos 16 mil, el 60 por ciento son niñas entre 11 y 17 años.

Recordó que el Estado de México junto a Nuevo León y Tamaulipas, Guadalajara y Guanajuato, son los primeros estados que tienen denuncias por sustracción de hijos.

Gabriela Amores dijo que hoy en día 6 de cada 10 matrimonios, sufren violencia vicaría, porque hay una normalización de esta violencia y en el día a día la mujer se acostumbra a vivir con ella, por lo que es muy difícil que se presenten las denuncias.  “Las denuncias llegan en los casos extremos, cuando les quitan a los hijos, o les quitan sus bienes”.

Dijo que si bien la violencia vicaría ha existido por muchos años, hasta ahora se está legislado y hablando de ella, por el incremento de la sustracción y desaparición de los hijos.

Lamentó que la denuncia por este delito solo ha incrementado en 2 por ciento, y que solo el  punto 13 se resuelve a favor de las mujeres, porque no hay igualdad y a que a lo más que se llega es a conseguir convivencias vigiladas.