A MITAD DE SEMANA

El INE no se toca ¿y?

A pesar de que parece que le duele hasta el tuétano a nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador, que se junte la gente para exigirle que haga bien su trabajo, mediante un acto muy republicano: la manifestación pacífica, él sigue sin entender el mensaje.

Está increíble que la manifestación se haya hecho de manera consciente, con gente que auténticamente fue con sus propios medios, todos vestidos de un color apartidista, sin más anhelo que demostrar que están dispuestos a exigir el derecho al voto, de manera universal, para poder votar por quien quieran, sin distinción, sin obligaciones.

Se dice que hubo acarreo en el sentido de que se organizaron para irse juntos a las distintas plazas del país, principalmente la del Zócalo de la CDMX, que según las cuentas, debió haber juntado más de 200 mil personas. Eso no es acarreo, acarreo es que den dinero o dádivas por asistir. No dudo que habrá habido alguno, pero es evidente que fueron muchos más los que auténticamente acudieron al llamado republicano.

A AMLO le duele el que le peguen en su propio orgullo, el cual es ese sentir de que la gente lo quiere, de que junta masas, después de haber dicho que en cuanto se sumaran 100 mil personas se iría de la presidencia. Se ve acorralado entre sus propios dichos, sin entender que por sus hechos está más que frito cada día más. La refinería de Dos Bocas no refina nada, el Tren Maya a través de FONATUR anunció la tala de más de 3 millones de árboles, el aeropuerto no es el “hub” que se pretendía, bueno ni siquiera resolvió los problemas del aeropuerto anterior; del INSABI se tuvo que rehacer a IMSS Bienestar, pero siguen con desabasto y no contamos con el sistema de salud de Dinamarca; del ejército por fin aceptó el cambio de forma de pensar, todos a las calles, pero están llenos de faltas a los derechos humanos, recién mataron a 11 personas en una camioneta y se las llevaron sin esperar a los servicios forenses; no bajó la gasolina, ni siquiera se  mantenido; pero eso sí, respecto al dólar que nunca lo mencionó, dice que esta situación es por su buena gestión financiera, sin pensar que en dado caso es por el Banco de México, no por su culpa, sin notar además que eso es una estrategia planeada por EE.UU. que tiene que ver con el cambio de maquila de Asia a México, pero que con lo que dijo en estos días a TESLA, negando la instalación en Nuevo León, se juega nuevamente su “buena gestión”.

Total que no ha habido absolutamente nada de lo prometido, no se han resuelto los grandes temas de inseguridad, a penas este fin de semana 236 personas muertas en México, el fin de semana más violento de la historia, sin medicinas; si bien aumentó el salario mínimo, aún no tenemos el poder adquisitivo promedio de la OCDE; la inflación en máximos históricos y sin plan alguno de contingencia; dependiendo de quién mida, somos el uno o el dos, en los países per cápita con más muertes por COVID.

Todo esto abruma a AMLO, no hay para donde hacerse, no cuenta con apoyo de la gente, lo mencionan con 700 millones de dólares para su campaña de 2006, en el Juicio de Genaro García Luna, proceso que ni por equivocación inició en México; la gente sigue esperando que se enjuicie a todos los expresidentes pero de eso nada; su propuesta de presidenta diario tiene problemas sobre todo con el Metro, por cierto que ya pasó un año y no se ve para cuando enjuicien a los responsables o se reconstruya; los mineros de Conchos aún no salen ni muertos; de Ayotzinapa ni hablar, la verdad histórica del sexenio anterior es igual o peor a la actual; y su Suprema Corte, ya no es de él, ahora peligra el puesto de su protegida que salió más pirata que el Sonido Pirata y su Medio Metro; ya tiene Yasmin Esquivel más evidentes consideraciones no por jurista sino por los nexos con Riobó, con todas las compras hechas con el gobierno federal, que sin duda será un buen hueso para los que vengan.

Me parece que en CONCLUSIÓN, la oposición se ha visto tan disminuida que ahora los partidos se incluyen entre la gente que va a manifestarse, que deja las calles después de la manifestación, totalmente limpias, que no necesitan partidos para expresarse y que sobre todo, están diciendo que toda la clase política son unos hipócritas que juran en vano, que no cumplen y que no hacen más que engañar.

Al INE no se toca, pero igual a todas las instituciones autónomas o lejanas al gobierno. Un verdadero gobernante de izquierda le quita el poder al central, deja que existan mucho más contrapesos, no centraliza el poder y niega hacer daño con su lengua al periodismo, para después recoger la ponzoña evidente.

Comenten con sus compañero y amigos, reflexionen y hagan pensamientos en conjunto sobre lo bueno o malo del gobierno, empecemos a reflexionar nuestro voto que aparentemente si no lo cuidamos, tiene le riesgo de ser el último.