• El México inseguro que aplaude y marcha • Colofón. -El triste Buen Fin

Mientras degusta de un bife de chorizo con chinchulín argentino, y una cerveza de raíz, el periodista lee los resultados publicados por el INEGI en su Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública 2022. Levanta la mirada, pensativo reflexiona en cómo nuestros gobiernos presumen resultados mentirosos. Y ¡ojo! –Aclara-, “no creo que con otro presidente las cosas pudieran ser diferentes, pero me queda claro que los lentes del actual mandato requieren de una nueva graduación”.
Cheque esto, insiste, durante octubre, de acuerdo con otra dependencia federal, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en México ocurrieron casi 92 ejecuciones diarias, y el acumulado de homicidios en los 47 meses de este gobierno, es decir, desde que inició la cuarta transformación, llegó a 135 mil 464 asesinatos. En el mismo periodo, con Peña Nieto, por ejemplo, la cifra era de 102 mil 800 ejecuciones, es decir, 33 mil crímenes menos que ahora.
Mientras que septiembre ocurrieron 2 mil 724 homicidios dolosos, en octubre la cifra creció a 2 mil 846, es decir, que en promedio, al día, en septiembre, fueron asesinadas 90 personas, y en octubre casi 92, las mismas que mueren al día desde la llegada de este gobierno, pero, más allá de los números, que son terribles, está el nivel de violencia con el que conviven los mexicanos. Por ejemplo, en ese mismo informe, los datos revelan que desde el 1 de diciembre de 2018, al 31 de octubre de 2022, fueron lesionadas en distintos niveles de gravedad, 679 mil 200 personas, en igual número de acciones violentas, es decir, casi 475 enfrentamientos diarios, ocurridos en asaltos, en todas sus modalidades, incluidas riñas y violencia intrafamiliar.
Vamos, no sólo debe culpar al crimen organizado, porque estos últimos datos, los de acciones violentas, no tienen que ver sólo con el hampa, sino con las conductas de una sociedad que parece, le han dado permiso para ser agresiva, y también tiene que ver con el alto nivel de impunidad. Chéquense esto, en la encuesta del INEGI, la cifra negra a nivel nacional, es decir, los delitos que no se denuncian es de casi el 94 por ciento, mientras que sólo el 6 por ciento presentaron denuncias ante el Ministerio Público y ¿qué ocurrió con estas querellas? Absolutamente nada.
Y solamente referimos algunos indicadores, pero, muchos marcharán el próximo domingo, defendiendo una causa política, la de una Cuarta Transformación de la que sólo pueden apreciarse caprichos tabasqueños y al parecer, aspirar o soñar con un México en paz, sólo con marchas y desfiles, es algo más utópico que realista.

Colofón. – El triste Buen Fin
El incómodo periodista recuerda aquella primera edición del Buen Fin, en 2011, fueron programados cuatro días de promoción y rebajas de productos y servicios durante la tercera semana del mes de noviembre. Así sería cada año. Bueno hasta en mercados y “los fayuqueros” ofrecían rebajas. Pero todo ha cambiado, la inflación (que de acuerdo con el Índice Nacional de Precios al Consumidor se ubicó en 8.53 por ciento) bajó la guardia del comercio micro, pequeño y mediano que, lo más que pudo hacer, fue programar ventas a meses sin intereses. Eso sí, las ventas en línea, en Mercado Libre, aumentaron en un 70 por ciento, es decir, evolucionamos hacia el mercado de compras por Internet. Los resultados de esta venta magna saldrán pronto, pero aun cuando lo que las autoridades den a conocer refleje motivos de presunción, esta edición del Buen Fin no entusiasmo a nadie… Hasta otro Sótano. Mi twitter @raulmandujano