LA GRANDEZA MEXICANA

Por: Daniel Valdez García

La gran cultura maya también puede ser considerada un imperio. Ocupó un vasto territorio hasta las actuales desde el sur de la actual República mexicana hasta naciones de hoy en día como lo son Belice, Honduras y Guatemala. 

 

Este gran pueblo tuvo grandes avances, y destacan sus famosos calendarios con una medición muy precisa del tiempo. Desarrollaron  importantes ciudades-estado como Tikal, Chichen-Itzá, Copán y Palenque con pirámides icónicas.

 

Un estudio publicado en diciembre de 2015 por arqueólogos de Estados Unidos y el Reino Unido reunió por primera vez todas las edades calculadas para los centros urbanos de las tierras mayas norteñas. Lo que el equipo encontró cambia significativamente nuestra comprensión de cuándo, y tal vez incluso cómo la civilización maya llegó a su fin. Contrariamente a lo que se creía, el norte había sufrido un declive durante una época de una gran sequía; de hecho, habían sufrido dos.

 

Es relevante el contenido del Código Puuc, que realmente es una obra de arquitectura con columnas, muros, fachadas, adornos como grecas y mascarones, que narra escenas de la vida cotidiana de la élite maya, como lo explica José Huchim Herrera, director de la zona arqueológica de Uxmal, en la península de Yucatán.

 

Dicho estilo Puuc  se ha conservado y se puede encontrar en buena parte de la península, llamada “región Puuc”. Que, que significa colina en lengua maya. Destacan los edificios de la Pirámide del Adivino, el Cuadrángulo de las Monjas y la Casa de las Palomas.

 

Cierro esta lectura con un fragmentos del Popol wuj, libro del consejo del pueblo Maya K´iche´, tomado del códice Matritense:

 

“La faz de la tierra no se manifestaba todavía; sólo el mar apacible y todo el espacio de los cielos.

 

No había nada que formara cuerpo; nada que se asiese a otra cosa; nada que se moviera, que produjese el más leve roce, que hiciese (el menor) ruido en el cielo”.