Peligra el INE

En la noche del próximo domingo 10 de abril, estaremos en el escenario posterior al día de la jornada de votación para la revocación de mandato, con un Andrés Manuel López Obrador que tendrá un argumento fijo: la gente o el pueblo, me quiere. Esto será aún si no le favorece el resultado, porque si fuera así dirá que los conservadores y adversarios ayudaron al abstencionismo y hará por eliminar al INE, por modificarlo o quitar facultades.
En caso contrario, que creo será el más probable, en que la gente haya votado por que sí continúe con su mandato, quedará la espinita de que no se cumplió el principio de vinculación con el porcentaje del 40% de la lista nominal. Así que de cualquier forma queda corto su argumento, por lo que en conclusión habremos tenido la encuesta más cara y mal hecha del mundo en esta época. Cara porque no es eficiente, es inocua, no es vinculante y no sirve de nada; mal hecha porque no colma los principios legales, no hay facultades que obliguen al gobernante a dejar el puesto, no existe una normatividad que restructure el gobierno en su salida y no hubo presupuesto destinado correctamente.
El culpable serán los otros, el principio de otredad; el pueblo es sabio y no supo porque no le dijeron bien. Argumentos muy creativos y poco realistas inundarán la boca de AMLO, pero habrá hecho algo importante: la revocación podrá ser vinculante para el siguiente periodo, lo que significa que puede regresar una segunda vuelta como oposición, ya sea él o colgado de algún títere en su representación.
El INE no tiene para donde hacerse, le dieron menos presupuesto, la propia autoridad cambia las reglas sobre promoción del voto durante el ejercicio, si sale bien, malo porque estaremos legitimando a un autoritario; si sale mal, peor porque no servirá de nada como autoridad organizadora de las elecciones.
Por ello creo que la única forma que tenemos para apoyar al INE es yendo a votar, anular el voto, a favor o en contra, pero ir a votar es el principio y máximo ejercicio de la democracia, es el acto para lo que esta regido el político y la cristalización de sus logros. El voto vale, démosle el valor.
Infórmense para hacer algo consentido, pensado y sobre todo, de corazón. Lean notas a favor y en contra, vean videos de Latinus y Chumel, pero también vean videos del Chapucero y Epigmenio Ibarra.
Recuerden que en una democracia lo más importante es la libertad, no la capacidad de elegir; la expresión y no la voluntad. Todo se resume a estar activo en nuestra sociedad o ser una sombra sin decisión.