Las vacaciones de Semana Santa siempre se me han hecho cercanas a las de invierno, sin embargo, por la dinámica con la que siempre se inicia el año son de las más esperadas, de ahí que en esta ocasión no sea la excepción por miles de mexicanos que anhelan ir a mojar sus patitas a Caleta y Caletilla o de plano escaparse a cualquier lugar que nos saque de la vida cotidiana.

José Elías Nader Mata
Una y otra vez, he manifestado que el Valle de Toluca es una de las zonas urbanas del país donde peor cultura vial existe, mucho por culpa de los ciudadanos que manejan como cafres y mucho por las autoridades que en este sentido están ausentes y no aplican correctamente el Reglamento de Tránsito para que exista orden.
En mi vida chilanga no me quedó otra y tuve que aprender a defenderme y a meter los puños pues eran tiempos donde el “bullying” no existía y el camino era defenderte de los abusos de la gente gandalla, violenta y estúpida.
Mi primera carrera profesional fue el Derecho, sin embargo, la vida me llevó por otros rumbos y sabía que si me iba a dedicar a los medios de comunicación tenía que acreditarme como periodista y estudiar constantemente comunicación, lo anterior, porque el informar representa un enorme poder y como todo poder conlleva una gran responsabilidad, más en estas épocas donde México necesita tanta luz para salir adelante.
Poco a poco la humanidad va recuperando una nueva normalidad después de sufrir lo que fue el confinamiento por la pandemia que durante dos años nos alejó de muchas cosas que antes eran comunes como el hecho de poder salir de casa el fin de semana ya sea con la familia o con los amigos.
Pues “haiga sido como haiga sido” la Selección Mexicana de futbol está en el mundial de Qatar que iniciará en el mes de noviembre, un premio a la mediocridad de nuestro futbol que tiene la fortuna de pertenecer a una confederación como la de CONCACAF pues en otro punto geométrico estoy seguro que con el nivel deportivo demostrado en estas y otras eliminatorias no se hubiera calificado.
La estrepitosa debacle del expresidente ENRIQUE PEÑA está marcada por dos sucesos, el caso de la Casa Blanca y el de la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, sucesos en los que fueron evidentes las mentiras, las manipulaciones y la forma en la que nuestro propio gobierno se quiso burlar del pueblo.
Mientras que los niños de mi edad veían a “Chabelo” o al “Chavo del Ocho”, yo era un admirador de las películas de PEDRO INFANTE, aquellas donde veíamos valores, historias motivadoras y en las que aprendíamos sobre la justicia social pues inclusive una de mis favoritas es la de “Los Gavilanes” en donde el ídolo del pueblo mexicano era el líder de un grupo de chinacos que escondidos en la sierra apoyaban a los que menos tenían de los abusos de los hacendados.
Terrible que nuevamente Michoacán sea nota nacional e internacional por hechos violentos y masacres que las autoridades no pueden seguir ignorando, lo anterior, después de que un comando armado asesinó a veinte personas en un palenque de la localidad de Las Tinajas en el municipio de Zinapécuaro.
Es válido que uno se aleje de determinado tipo de gente con la que no hay química, en mi caso las personas hipócritas, falsas y “mochas”, me caen en la punta del hígado pues creo que si algo demanda este mundo son seres humanos honestos, derechos y que digan las cosas como son, se dediquen a lo que se dediquen.