“Atrévete a lo correcto…aunque sólo estés” Thomas S. Monson

Cuántas veces hemos escuchado la frase épica de: “…no hagas cosas buenas que parezcan malas…” ¿cuántas? ¿cientos? ¿miles? ¿millones? ¿siempre? ¿toda la vida? ¿desde que tenemos uso de razón¬? Lo cierto del caso es que a menudo casi siempre a diario, caminamos con esa ferviente corazonada y retumba en nuestros adentros dichas palabras y, lo más significativo, es que también a menudo nos equivocamos a la hora de autoevaluarnos y como consecuencia permitimos y dejamos que sean otros quienes utilicen la guillotina de la frialdad sin escrúpulos para tachar y señalar sin siquiera saber los porqués y mucho menos los para qué. Existen entre nosotros, de hecho, conviven a diario en nuestro entorno, parecen sanguijuelas pegadas a uno con la intención -mínima- de que caigas y/o te equivoques para tratar de imponer sus anárquicas, obsoletas, groseras, disque intimidantes y risorios justificantes para una que otra “decisión”. Su misión rebasa cualquier escenario, son presa de sus propios errores y caminan por la vida como si nada hubiera pasado o peor aún, como si nunca hubieran hecho daño alguno, intentan inyectar su soez proceder con base en su iracundo pensamiento y sus trizas de emociones descoyuntadas, no saben identificar y menos soslayar un delicado minuto, vaya, en la mayoría de las ocasiones vierten tanto daño en tan sólo segundos que, inmediatamente después, al otro, ya nada es ni será igual…
Parece que me saqué estas líneas de un cuento de terror, pero no, es la más pura y cruel realidad que se ha retorcido a lo largo de muchos años y que, inevitablemente muchos pasamos por momentos incomodos y que solo la educación, esa que se mama y se respeta, coloca a cada quien, en su sitio, en su tiempo y en su realidad. O dicho de otro modo muy a mi estilo: al tiempo…y es aquí justamente cuando derivado de lo que ha envuelto al tricolor que supuestamente “dirige a control remoto” Gerardo Martino y su equipo, con la venia de la santa inquisición del futbol mexicano, cuando tenemos que darnos cuenta que la realidad en muchas ocasiones supera a la ficción. Más allá de que por temas personales, familiares, de salud, o hasta porque hasta en el “guion” -contrato- estaba estipulado ¡patrañas! se lo pasan tratan de engañar a todo un sector que ésta ávido de buenos resultados, de cambios sustanciales en cada rincón del país, pero aaaaah no señor, hay que hacerla de jamón -ya saben de qué- y tapar lo que no se puede y entonces saltan como hormigas ante la señal de el o los dictadores, los lamebotas y cobijan, toleran y soportan escenarios nefastos que solo conducen a esa muerte anunciada.
Hace unas semanas en una de esas charlas que a menudo tengo con un amigo y compañero, le dije algo así como: “…mi equipo…” a lo que respondió categóricamente, casi saltando de su asiento, con voz directa, ceño fruncido y mueca retadora: “… ¿tú equipo?… ja!” capté entonces y aunado a lo descrito, que no se trata solamente de hacer lo mejor que puedas tu trabajo, sino que siempre existirá alguien a quien no le importa ni el antecedente inmediato, ni lo valora, ni recategoriza y mucho menos, le otorga el valor que corresponde. Así en el Tri, muchos siguen apostando a que será la mejor versión del conjunto nacional, a que romperá esquemas y estigmas, que será lo mejor que nos ha pasado, y bla, bla, bla, sin embargo, lo que es real, es lo que se ve, se sabe y se siente. Faltan 4 meses para Catar y los tumbos siguen y seguirán para que llegado el momento y lamentablemente les escriba y siga diciendo: ¡se los dije!
En temas más alegres y que nos deben llenar de gracia y felicidad, pero al mismo tiempo darle su real dimensión y colocarlo como un hecho aislado por lo bien conseguido y mejor conquistado para que nadie más se cuelgue el logro, es lo que consiguieron las hoy campeonas de la Selección Mexicana de Flag Football. Unas jóvenes que apostaron a cerrar filas, a soñar y crear espacios en una disciplina que tiene mucho impacto en el país y como ya sabemos poco -casi nulo- apoyo y difusión. Es por ello que habiendo obtenido medalla de oro obtenida en los World Games 2022, se dice que la Federación Mexicana de Futbol Americano -FMFA- le dará continuidad a este proyecto para que sea mayor el impacto y se sigan cosechando más y mejores resultados, porque también es digno de destacar y reconocer la valía del bronce que se colgaron nuestros compatriotas varones. Y para que seamos testigos fehacientes de estos logros, y esto viene a colación con que se dice poco y se hace mucho, se hacen cosas buenas que son mejores y se logran éxitos que siembran herencias buenas, por ello, más que seguir felicitando a estos equipos, jugadoras y jugadores, coaches, entrenadores, representantes, padres de familia, y buenas autoridades deportivas comprometidas con el crecimiento del acervo deportivo de la especialidad, sirva el espacio y el momento para ejecutar un llamado a esas otras “autoridades” de pantalón largo que solo posan para las fotos y desvían la atención, porque esta es la realidad deportiva del país, tenemos que hacer muchooooo para detectar nuevos talentos y se pueda acrecentar y como en el caso en comento mantener el nivel de los estos representativos nacionales y no de aquellos que solo nos venden sueños guajiros.
Pásenla bien!!!