Los partidos absurdos

Sin duda es una pena que nuestra democracia solo dependa del INE, que decide sus pasos por los Consejeros que son elegidos por la Cámara de Diputados, es decir, por los partidos. Es una pena que AMLO pretenda cambiar o quitar al INE, solo por no seguir su discurso. Es una pena que apenas pasemos del 50% de votación en la lista nominal, pero lo que más pena da son los actores de esa democracia.
Hace años había posibilidad que a nivel federal se postularan candidatos independientes, ahora sólo es posible a nivel local, sin duda es una área de oportunidad porque en lo general, los partidos demuestran cada que pueden la porquería que son.
Son numerosas las ocasiones que son invitados por los medios de comunicación masivos, en horario estelar, para debatir sobre temas de interés nacional en un formato muy ciudadano: el diálogo; pero en lugar de eso, solo demuestran lo podrido que están, y no hablo de la corrupción, sino lo que demuestran con los argumentos de sus representantes.
Hace unos días en el noticiero de Daniele de Iturbide fue un desastre el atropello de palabras entre los representantes del PVEM, PAN, PRI y MORENA.
La representante del PVEM totalmente desubicada igual que su partido, vendido al mejor postor, un día con el PAN, después con el PRI y ahora con AMLO, con una idea muy clara (eso sí) comentando que son ellos y nadie más que ellos, los que impulsan las políticas medioambientalistas, pero se atoran al explicar que AMLO ya le partió el queso a la selva del sur del país con el cambio del proyecto del Tren Maya, para pasar sobre área verde, sin dictamen ni cuidado, pero como es el partido en el poder, pues ahí siguen ¿verdad? (de rémoras).
El representante del PAN, con muy buenos argumentos sobre lo mal hecho por MORENA y AMLO, pero atropellando las ideas de los demás, sin dejar de hablar, el moderador pidiéndole orden y mesura para que los demás (principalmente el de MORENA) pudiera hablar. Peleando por pelear, sin idea, abanderando la oposición mexicana, muy lamentablemente, esa es nuestra mejor oposición, la pelea y el arrebato de palabra.
El representante del PRI, gris, vacío, con argumentos que solo parecían autogolpes, indicando que AMLO pareciera regresar al pasado, pero diciendo que el PRI en el pasado armaba mejor al país (que pareciera posible pero sin duda, de risa), sin entender que la responsabilidad se asume, cosa que nunca ha dicho el PRI, perdón, a la sociedad que ya no creyó en ellos, por no tener cuadros, por colocar elegibles a los mismos, al mismo grupo, así jamás podrán legitimarse.
Y el representante de MORENA (más bien de AMLO), más absurdo que los demás, indicando que no tenemos una crisis de seguridad, cuando llevamos años pero aaaaaños en crisis de seguridad, ahora con feminicidios al máximo y con el muy vergonzoso primer lugar en muertes de periodistas en todo el mundo; mostrando en una tablita que como la tendencia de asesinatos no va en aumento pues quiere decir que va a la baja y le coloca un 34% a la baja, no es posible, cuando hay más y más muertes, cuando hay intolerancia, cuando rompe la autoridad marchas, campamentos y detenciones de casetas; MORENA y AMLO eran los primeros en pedir libertad de expresión y son ellos los que ahora la reprimen, sin poder decir absolutamente nada de la contradicción de la austeridad con la se expresa el presidente pero con la vida de ricos que tienen, y de la corrupción impune, tan flagrante, ni una palabra. En resumen, una basura.
Tal vez se trate de una epifanía, pero necesitamos adentrarnos mucho más como ciudadanos en el poder, en la organización y en actos republicanos, que haga que los actores evolucionen, se moderen y realmente ejecuten acciones que sean progresistas y desarrolladoras del bienestar popular.
Pero así nuestra democracia actual, con alternancia pero aún del lado oscuro de la historia.