FELICES 30 AÑOS, JAJAJA!

Que agónico llega el PRD a “celebrar su 30 aniversario”, con una algarabía que ni ellos mismos se creyeron, cuando se encuentran en la peor debacle que un panfleto de partiduchito puede tener de plano en la lona y ni la sombra de lo que eran, pero eso sí, las sobras.
Pero bueno dicen que lo que nace chueco nunca se endereza, y así fue el origen de este partido del “Sol Azteca” que se encuentra en pleno eclipse del cual no se va a levantar, un partido fundamentalmente conformado por sus principales caciques como lo fueron Cuauhtémoc Cárdenas, y Porfirio Muñoz Ledo, mismos que en este tiempo ya ni en sus filas están al igual que otras figuras “emblemáticas” como Andrés Manuel López Obrador, Ricardo Anaya, de los cuales hay que citar que éstos cuatro dentro de muchos más que ni se quienes, pertenecieron en sus orígenes políticos al Partido Revolucionario Institucional, mismos que con éste cambio de estafetas demuestran que no tienen ni principios sólidos en lo personal, ni mucho menos algo que se llama ética y son simples chapulines que brincaron de las filas tricolores a las amarillas y ahora ni en ellas se encuentran, es más uno de ellos nos gobierna la república desde otro partido, o sea que calidad tienen estas gentes, dentro de cientos de niveles inferiores que se vieron emborrachados con el canto de las sirenas.
Sale el dirigentillo que tienen que se llama Ángel Ávila y dirige algo que se llama “dirigencia colegiada” a decir que no pasa sana que están a todo dar y que van a seguir adelante, palabras más, palabras menos, pero si analizamos que los votos a su favor en las pasadas elecciones federales fueron de 1.9 millones de votos, al igual que lo tuvo en mil novecientos noventa y uno pues de donde han crecido, al contrario, han retrogradado, ya que hay que analizar de que en el 91 había solamente 36 millones y medio de electores, cuando en el 2018 había 89 millones, y bueno la pregunta sería si proporcionalmente eso es lógico?.
La época dorada de este partido fue a finales el sigo XX cundo ganaron diversos escaños de poder como Cárdenas la regencia aun llamada así del Distrito Federal, Ricardo Monreal en el 98 la gubernatura de Zacatecas, , Alfonso Sánchez Anaya la de Tlaxcala en el 99, y Andrés Manuel López Obrador nuevamente el D.F. y hablo Salazar Mendiguchía en el dos mil, llegando en sus “épocas de gloria” a tener 17 gubernaturas del país al mismo tiempo gran diferencia a la actualidad de hoy que solo tienen una que es la Michoacán con Silvano Aureoles Conejo, que precisamente ayer se dio a conocer una encuesta en la que se da a conocer la aceptación social de cada entidad de los habitantes por sus gobernadores y es el que salió en el peor nivel de todos.
Y bueno que podemos decir de cuantos se encuentran conformando el Congreso de la Unión, de quinientos diputados que integran dicha cámara baja solo hay once y del Senado que se suma de 128 legisladores de la llamada cámara alta solo cuentan con cinco, así de pepenadores y con dicha representación se encuentran.
Sin duda que el gancho al hígado que tuvo este partiduchito se encuentra la salida de Andrés Manuel y la conformación de un nuevo partido como lo es Morena, que como sabemos el año pasado lo encumbró a la silla presidencia, después de haber participado en dos elecciones en las que perdió la presidencia, en el dos mil seis y en el dos mil doce, crea este partido y la desbandada de perredistas no se hizo esperar y varios de los dirigentes de cierto renombre que se afiliaron a dicho partido como Pablo Gómez, Ifigenia Martínez, Alejandro Encinas, Marcelo Ebrard, Dolores Padierna y claro está Porfirio Muñoz Ledo dentro de miles más que como ratones en un barco que se está hundiendo saltan.
Pero como dicen el suicidio es “mutuo propio” y se lo dieron ellos solitos el año pasado cuando se atreven a coalicionarse para la candidatura presidencial con el Partido Acción Nacional y levantarle la mano a Ricardo Anaya como su candidato, eso le cayó como piedras en los riñones a la poca militancia que aún tenían, obteniendo por ellos mimos la ridícula cantidad de menos de tres millones de votos, cuando según cifras que da a conocer el INEGI dicen que tienen registrados como militantes cinco millones doscientas mil personas, o sea que al final de cuentas ni su propia gente votó por ellos.
Yo creo ilustre lector que ya hay que comenzar a rezarles rosarios a este partido, que en breve así como va hasta el registro va a perder, que no alcance en una elección ni el tres por ciento de la votación, y pase a la galería de “Institutos Políticos” que dejan solo huella efímera en la historia: HASTA AQUÍ MIS LINEAS…
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