GRILLANDO

Recuerdo que cuando entré al periódico El Valle hace más de 31 años la forma de hacer periodismo era muy diferente a la de ahora, lo anterior, porque hace tres décadas no existían las herramientas tecnológicas con las que actualmente contamos y que transformaron totalmente la forma de comunicar, informar y hacer periodismo, ya que hoy no solo nos tenemos que preocupar por una impresión en papel, sino por una página electrónica, redes sociales y contenidos multimedia, que son parte de lo que demanda la sociedad que desea estar bien informada.  

Un periodista que ha tenido un gran impacto es CARLOS JIMÉNEZ, quien a través de la nota policiaca informa en Multimedios y en sus redes sociales con gran éxito, sin embargo, ayer exhibió un video en el que un grupo armado lo amenaza por su labor periodística, obviamente al estilo de estos grupos criminales que entre mentadas de madre y groserías le dicen que se metió con la persona equivocada y que por ello lo van a asesinar.  

Conocido también como “C-4 JIMÉNEZ”, informó que de igual forma recibió una llamada y un audio con el mismo mensaje, algo lamentable, pues con estas agresiones se sigue lacerando la Libertad de Expresión, no solo del gremio de la prensa, sino de todo el pueblo mexicano que demanda saber la verdad.  

Como lo he dicho a lo largo de los últimos años, las y los periodistas mexicanos no somos el enemigo como algunos han tratado de señalar, al contrario, en su mayoría, siguen siendo fieles de la balanza para dar a conocer lo que sucede todos los días en México, luchan contra la corrupción y el corrupto, defienden la verdad y son un sector fundamental para la vida pública y privada de una nación que demanda seguir viviendo en un Estado de Derecho donde se respete la ley, lo justo y lo equitativo.  

Y que quede claro que no solo se trata de protección, como ya lo han anunciado las autoridades, se trata de ir en contra de los líderes de estos grupos, pues mientras sigan en la calle son un riesgo para el periodista y para todos, de ahí que ojalá existan soluciones y no simulaciones como lo hemos visto en el caso del periodista CIRO GÓMEZ LEYVA que a la fecha sigue impune y con el riesgo de que los autores intelectuales se salgan con la suya, algo que sería lamentable, pues ya basta que en México la gente buena esté en riesgo y los criminales estén más protegidos que nunca.  

LA GRÁFICA DE HOY  

Del fotógrafo JAIME ARRIAGA, es de una escena lamentable donde aquellas personas con discapacidad no pueden circular por las banquetas debido al mal estado de las mismas, una realidad del Valle de Toluca donde de plano las obras para tener calles y banquetas dignas está en el olvido.  

Las autoridades y la gente difícilmente reflexionan sobre el tema hasta que ven este tipo de escenas que reflejan la falta de empatía con aquellas personas que sufren una discapacidad y a las que les cuesta mucho trabajo llevar una vida digna, porque simple y sencillamente no existen las condiciones para que puedan desarrollarse.  

Así que ahí les dejó esta foto a las autoridades, para que piensen en la importancia de tener banquetas dignas en beneficio de toda la gente, pero principalmente para que las personas que tienen una discapacidad puedan utilizarlas sin el riesgo de que sufran un accidente porque al final tienen que circular por las calles, que con tantos baches también son un riesgo.  

GRILLANDO

Y VA DE CUENTO  

Jesús, muy preocupado, llama a sus apóstoles a una junta de emergencia por el alto consumo de drogas en la Tierra. Después analizar el tema, llegan a la conclusión de que lo mejor para poder enfrentar el problema es probar la droga y después tomar las medidas pertinentes. Se decide que una comisión de apóstoles baje al mundo y consigan diferentes drogas. Se efectúa la operación con el máximo secreto y a los pocos días empiezan a regresar los comisionados. Jesús va recibiendo a todos sus discípulos: – ¿Quién es? – Soy Pablo. Jesús abre la puerta. – ¿Y tú qué traes, Pablo? – Traigo hachís de Marruecos. – Muy bien, hijo, entra.  

– ¿Quién es? – Soy Marcos. Jesús abre la puerta. – ¿Y tú qué traes, Marcos? – Traigo cocaína de Colombia. – Muy bien, hijo, entra.  

– ¿Quién es? – Soy Mateo. Jesús abre la puerta. – ¿Y tú qué traes, Mateo? – Traigo crack de Nueva York. – Muy bien, hijo, entra.  

– ¿Quién es? – Soy Juan. Jesús abre la puerta. – ¿Y tú qué traes, Juan? – Traigo marihuana de México. – Muy bien, hijo, entra.  

– ¿Quién es? – Soy Lucas Jesús abre la puerta. – ¿Y tú qué traes, Lucas? – Traigo heroína de Ámsterdam. – Muy bien, hijo, entra.  

Y finalmente… – ¿Quién es? – Soy Judas. Jesús abre la puerta. – ¿Y tú qué traes, Judas?  

– Traigo… ¡Al FBI! ¡Todos contra la pared, cabrones!  

HASTA mañana con más GRILLANDO. Comentarios en Twitter en @pepenader y en [email protected]