GRILLANDO

POR: JOSÉ ELÍAS NADER MATA  

Era un chamaco cuando junto con mis amigos fuimos invitados por un candidato a la presidencia municipal de Toluca a su campaña, gran oportunidad para hacer “pininos” en la política y aprender sobre la misma. Inclusive, recuerdo que días antes de la elección en la calle de Bravo un grupo de panistas agarraron a un compañero y lo querían golpear, por lo que llegamos de inmediato para hacerle el “paro” en lo que fue una verdadera batalla a puño limpio.  

Al otro día, por azares del destino, en un restaurante me encontré a los dirigentes estatales del PRI y del PAN echando un buen tequila y platicando, una gran lección porque mientras uno traía el ojo morado, los dirigentes reían, conciliaban y negociaban, de ahí el aprendizaje de nunca más pelearme o discutir con alguien por política.  

Y esta anécdota la cuento, porque al cierre de las elecciones, veo que, a través de las redes sociales muchas y muchos se andan mentando hasta la madre, una lucha estéril, pues como lo platico anteriormente, tampoco hay que apasionarse, ya que, tarde o temprano los líderes se sentarán, beberán tequila y negociarán, algo que pasa todos los días en nuestro querido México.  

Como mexiquenses, el próximo 4 de junio, tenemos no sólo el derecho, sino la obligación de ir a votar, para que la democracia haga su trabajo, pues después de esta fecha, se deben acabar los partidos políticos y entender que, el Estado de México, demanda de la unidad de todos para salir adelante, lo anterior, más allá de la polarización de la nación que sólo nos ha dejado aspectos negativos y nos ha frenado en el camino que tenemos que seguir para salir adelante.  

LA GRÁFICA DE HOY  

Fue de hace algunos años en el cráter del Popocatépetl, volcán al que íbamos seguido con los scouts comandados por nuestro jefe de Tropa EDÍN BARRIOS, quien siempre nos enseñó a dominar la montaña, pero, respetándola y agradeciéndole la oportunidad de vivir momentos mágicos y especiales que hoy son pieza importante de nuestros recuerdos.  

Y precisamente de ello quiero hablar, de cuando salíamos del albergue alpino de Tlamacas en la madrugada, para iniciar el ascenso y horas después llegar a la cima de Don Goyo, en donde me llamaba la atención voltear hacia el cráter donde la magnificencia de un volcán, nos permitía ver que, estaba vivo, de ahí que años después hiera erupción como ahora lo estamos viviendo.  

Sin embargo, desde esa época, siempre observé que, en caso de una emergencia hay muchas deficiencias y aspectos que ahora se deben considerar, como el mal estado de las vías de comunicación para evacuar a la gente, mismas que tienen infinidad de topes que deben ser retirados, ya que frenan la circulación y el comercio ambulante que obstruye el libre tránsito.  

Lo anterior, impera hasta nuestros días y por ello, es que a nivel nacional se han sacado notas al respecto donde se destaca que en caso de emergencia y de tener que evacuar rápidamente hay muchas deficiencias, de ahí que las autoridades municipales, estatales y federales tengan que emplearse a fondo en este tema para prevenir y no lamentar, pues recordemos que la naturaleza no tiene palabra de honor y en cualquier momento nos puede sacar un buen susto.  

Así que, manos a la obra, a trabajar al respeto y a no jugarle al vivo, pues recordemos que a México le urge fermentar la cultura de la prevención y no de la lamentación, aquella que tantas tragedias ha ocasionado por culpa de esos servidores públicos que no hacen su trabajo y una sociedad que no entiende los peligros a los que se enfrenta.  

GRILLANDO

Y VA DE CUENTO  

Este era un espermatozoide perdido que andaba por los ojos y dice: Hola, ¿tú quién eres?  

– Yo soy los ojos.  

– ¿Y qué función tienes?  

– Yo observo todo.  

Marcha desesperado y llega a la boca, por lo que pregunta: Hola, ¿tú quién eres?  

– Yo soy la boca.  

– ¿Y qué función tienes?  

– Yo consumo los alimentos que necesita el cuerpo.  

Ya cansado, llega al corazón y dice: Hola, ¿tú quién eres?  

– Yo soy el corazón.  

– ¿Y qué función tienes?  

– Yo palpito.  

A lo que emocionado responde: ¡A huevo! ¿Me echas un aventón? Yo voy para allá.  

HASTA mañana con más GRILLANDO. Comentarios en Twitter en @pepenader y en [email protected]