La conciencia

Muchos son los llamados pocos son los elegidos, la vida transcurre frente a numerosos anuncios que nos exigen a todos contar con más conciencia.
Las redes sociales se inundan de personajes “lords” y “ladies” que en una falsa exigencia de sus derechos trasgreden el de los demás. Si observan bien, se encuentran estos personajes en lugares sencillos, en los que el lujo no es la mónita de venta, sino más bien se tratan de lugares modestos en los que uno podría obtener productos y servicios sencillos donde poco probable existe un poder encadenado al dinero.
Entonces ¿por qué personas sencillas se atreven a comportarse de esta manera tan terrible? ¿por qué estigmatizamos a personas presumiblemente con posibilidades económicas como portadores del autoritarismo y trasgresión? ¿no será a caso que todos somos iguales y tenemos los mismos errores?
AMLO desde su campaña ha desviado la atención de temas importantes, con burlas y mofas hacia los demás. ¿Recuerdan a Ricky Rickin Canallin? ¿Al cállate chachalaca? ¿El despeñadero? Pues la burla y el sarcasmo se han hecho presentes con términos como “la mafia del poder” o “fifí”.
La discriminación es un mal hábito que se esconde tras un chiste o juego, pero es algo que debemos erradicar sobre todo en el discurso político.
Hoy la primera dama pide respeto debido a la burla emitida por un comunicador, pero lo desmerecedor empieza cuando a ese comunicador se le impide hacer su trabajo. Chumel Torres se autodefine como un payaso que da noticias o un comunicador del sarcasmo y que su noticiero es el peor, es decir es un entretenimiento para la sociedad. Respetamos y avalamos el derecho a exigir respeto por parte de la primera dama hacia su hijo por haberle puesto un apodo, pero no avalamos la venganza ni la censura, que además es incongruente a la apertura que exigió AMLO en los medios informativos cuando no formaba parte del poder, pues en esos ayeres hacía mofas con el nombre de la gente que sin ser payaso ni trabajar de entretener era el objeto de sus bajezas, incluso sus burlas se regodeaban de quien envestía la presidencia de México, por lo que hoy no cabe el discurso hipócrita de sentirse ofendidos, y exigir censura, ¿acaso no se jactan de ser mejor que los anteriores?
Entonces desde esta redacción de nuestro periódico EL VALLE, exigimos congruencia a quienes gobiernan desde el Palacio de Gobierno, que no generen el discurso de odio y de división porque todos nos podemos encontrar en el error, hasta el mismo presidente; que siga las recomendaciones de sus expertos en salud, que use cubrebocas, que entienda que si él sale, la gente lo seguirá porque es ejemplo para todos.
Exigimos como parte de la sociedad, que todas las autoridades y cada uno de nosotros tengamos conciencia de la situación en la que vivimos, puesto que todos somos seres inteligentes que entendemos y razonamos el escenario que no toca vivir. Todos con cubrebocas por respeto e higiene hacia los demás; con sana distancia; respetando la labor del médico; compadeciendo a quienes no pueden dejar de ir a trabajar; evitando sacar en un arrebato nuestro lord o lady, exponiendo nuestra ignorancia a los demás; pero sobre todo exigiendo que quien se presenta como primero de entre sus iguales, sea el ejemplo para todos nosotros de educación, respeto y responsabilidad. Es decir, que demuestre en todos los aspectos, su Conciencia. Saludos y muchas gracias.